Culiacán, Sinaloa.- Concesionarios del transporte urbano están a la espera de que el Gobierno del Estado les autorice un incremento de un peso a la tarifa del servicio, ya que van por el segundo año con el mismo precio al usuario de 9.50 pesos en camiones de primera clase y 8.50 en los de segunda, se quejó Miguel Luna Ley.
El secretario General de la Alianza de Transportistas Urbanos y Suburbanos de la Confederación de Trabajadores de Mexicanos (CTM), dijo que durante este periodo las refacciones y combustibles han aumentado más del 40 por ciento.
Aclaró que no se trata de poner un ultimátum al gobierno para obtener la respuesta, porque los dueños de los camiones saben que dañan la economía de las familias; sin embargo, las autoridades tendrán que dar un subsidio a los combustibles o permitirles ajustar el cobro al pasajero.
“Como transportista vas a pasar por muchas situaciones de este tipo, porque lo más difícil es tocarle la bolsa al usuario, a la gente que menos tiene, y nosotros forzosamente tenemos que subirle para poder seguir prestando el servicio, tenemos que llevar este problema junto con el gobierno”, aseveró.
Miguel Luna Ley lamentó que algunos agremiados han vendido sus derechos de concesión por ya no ser redituable para el trabajo, y a esto suma que en la ciudad de Los Mochis se vende la gasolina y el diesel más caro del país, de ahí que ni cómo pensar en comprar unidades nuevas si no hay un subsidio al combustible o el ajuste tarifario.