Guasave, Sin.- En la misma cuartería llamada “El Espanto”, donde la bebé Karen murió este jueves dentro de la sindicatura de Ruiz Cortines, se detectó a otro bebé grave con una posible neumonía, quien tuvo que ser trasladado al hospital de inmediato para que recibiera la atención y vigilancia médica, informó la directora de Salud, Andrea Leticia Espinoza Camacho.
Justo estaban hablando con la mamá de Karen cuando se les dio aviso que en este mismo lugar estaba otro niño enfermo; al intervenirlo sus padres lo identificaron como Adán de tan solo dos meses de edad, ya tenía una semana con una supuesta gripa, pero cuando lo revisaron notaron que traía dificultad para respirar y además le roncaban sus pulmoncitos.
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Por medio de la ambulancia de la Dirección de Salud fue que el menor fue trasladado junto con su madre, quien es una adolescente de 17 años originaria de Chihuahua, detalló la funcionaria.
“En esta misma cuartería estando ahí nos avisaron que había otro bebé mal, un bebé de dos meses también que tenía una semana con problemas de gripa, supuestamente, pero ya al momento de revisarlo nos dimos cuenta que traía datos de dificultad respiratoria leve y se escuchaban sus pulmoncitos ya con un ronquido y un quejido que tenía el niño, entonces procedimos nosotros en la ambulancia del Ayuntamiento a trasladarlo al Hospital General, ya quedó hospitalizado para que se le hagan los estudios correspondientes y darle la valoración por parte de Pediatría”, reveló.
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Por otra parte, la directora de Salud informó que Emanuel, de un año, que también fue hospitalizado esta semana por una deshidratación y un cuadro gastroenteral, ya salió del hospital este mismo jueves, en tanto que el adulto de 40 años que también se hospitalizó, pero la semana pasada por un abdomen agudo, su estado de salud es estable, pero padece insuficiencia renal y es candidato a diálisis.
La funcionaria municipal señaló que este es un problema con el que navegan prácticamente contra corriente, por ello es que fue enfática al precisar que se requiere de la corresponsabilidad de todos, por lo menos de los dueños de las cuarterías para que ellos se mantengan al pendiente de la salud de sus arrendatarios, que en caso de detectar a alguna persona enferma hagan el aviso a las instituciones de Salud o los lleven a los centros de atención médica que para esta población son gratuitos.