Temen trabajadores ante irrupción de comandos

Los Mochis, Sin.- Ante la creciente irrupción de comandos
armados que sacan por la fuerza a pacientes heridos de bala, un camillero que
tiene 15 años laborando en el Hospital General narra a Línea Directa que nunca
se imaginó vivir una experiencia tan terrible como aquella cuando en pleno día
un grupo de gatilleros lo encañonó para que lo llevara al área de terapia
intensiva donde estaba el paciente herido que iban a rescatar.
?Estaba en la puerta principal y entró el grupo ese; me
agarraron a mí del cuello y me dicen dónde es terapia; pásenle, les dije, aquí
es terapia, pero me pusieron el rifle en la espalda, me tiraron al suelo y
tiraron a  todos y empezaron a hablar al
fondo, porque el paciente estaba hasta el fondo. Se les dijo él es el paciente,
y nos dijeron ahí quédense, agachen la cabeza y no se muevan y ahí nos quedamos
la doctora, las dos enfermeras y yo, tirados en el suelo. Es impresionante cómo
entran y cómo salen?, dijo.
El personal del Hospital General se siente inseguro,
indefenso, expuesto a ser víctima de los grupos armados, los cuales, dicen, ya
entran y salen como Juan por su casa a cualquier hora en esta institución, como
la noche del lunes en que un comando rescató a un sicario herido en la balacera
ocurrida el domingo en Los Álamos.
?Nos sentimos a lo que ellos digan. Nosotros tenemos bien
claro que si ellos vienen pues vamos a seguir instrucciones, no vamos a oponer
resistencia, y nada más. La vigilancia la tenemos, pero no está como para esos
casos, esto es algo que nos está rebasando y desgraciadamente somos una
institución de salud y adelante, si tienen que venir que vengan y si se tienen
que llevar a alguien pues que se lo lleven?, señaló.
Incluso, hay trabajadores que piden a las autoridades
superiores que haya un área exclusiva para atender a los pacientes heridos de
bala cuya presencia representa un riesgo para el resto de los enfermos y
trabajadores del Hospital General.
?Que hubiera una parte exclusiva para toda la gente que
hieren para que se evitaran más matanzas de personas inocentes, así sería una
cosa magnífica porque estamos ahorita en una situación muy deprimente, de mucho
riesgo?, dijo.
Con tristeza y coraje, estos empleados del sector salud ven
que su noble tarea de salvar vidas se ha convertido en un trabajo de alto
riesgo debido a la violencia que impera, y en una institución donde no hay la
suficiente seguridad que garantice su propia integridad.