Sinaloa.- Son unos niños, sus edades no superan los 13 años, y ellos ya empuñan un fusil para participar, supuestamente, en el “Culiacanazo”, la noticia que ha dado la vuelta al mundo y mantiene a todo Sinaloa en estado de sitio.
El impacto de estos hechos ha sido mayúsculo, pero de confirmarse que estos niños están participando en estos hechos con los grupos “contrarios” a la ley, el estado de indefensión se patentiza.
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“Como en una guerra, reclutaron niños, ahí están y no precisamente saltando de emoción, más bien alentados por un criminal que no le importa la vida de nadie”, externan usuarios de redes sociales que han compartido las imágenes de los pequeños.
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Por cuidado de su identidad, se han difuminado los rostros de los pequeños, que están dentro de una camioneta sentados uno a un lado de otro, mientras una voz se escucha y les dice: “qué vergas eh“, mientras se escuchan los radios de comunicación.
Los pequeños llevan gorras y chamarras de color negro, uno con el radio matra en mano, y ambos con rifles apuntando al suelo, mientras que a un lado de él, el chofer de la unidad, un adulto, deja ver un rifle de alto poder listo para ser sacado y activarlo.
A lo lejos se ve un poblado, una tienda de convivencia y el sol que encandila a cualquiera mientras las personas se movilizan en un sector en donde una casa de color rosa “pinta” el paisaje, que hoy no ha sido para nada tranquilo en Sinaloa, que inició entre llamas, pólvora, balazos y temor generalizado.
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Los niños de la guerra, no importa de dónde sean, si de Sinaloa o de otro sitio de México y que han sido exhibidos en actos violentos o enfundando armas, o en riesgo inminente conminados por adultos, es uno de los hechos que más duelen.
La procedencia no ha sido confirmada directamente en Sinaloa, sin embargo en las tendencias de redes sociales comienza a viralizarse junto con la ola violenta que desde poco antes de las 5 de la mañana inunda a todo el estado, de donde nadie entra o sale, ni por aire, ni por tierra ni por mar.