Los Mochis, Sin.– Los establecimientos afiliados a la Federación Sinaloense de Centros de Rehabilitación son clínicas con más de 10 años de experiencia en el tratamiento de las adicciones y están dirigidos por directores que se han venido profesionalizando, por lo cual están certificados por la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), aseguró el presidente de este organismo.
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Javier Pellegaud Cervantes alertó que han proliferado muchos centros “irregulares” que no cumplen con las normas clínicas, sanitarias, ni de Protección Civil, que no proporcionan tratamiento médico ni trato adecuado a los internos, quienes a su vez los consideran como cárcel o lugar de castigo, a diferencia de los que sí están certificados porque siguen un modelo y los lineamientos operativos que establece la Conadic en la norma 028.
“La a visión de los centros haga referencia a una cárcel, a un lugar de castigo, cuando nuestros espacios para atender personas en realidad son más parecidos a escuelas, a campos de entrenamiento de alto rendimiento porque el tener un modelo estructurado de tratamiento basado en evidencia científica, hace que trabajemos de esa manera”.
El también psicólogo y consejero especialista en tratamiento de adicciones precisó que las principales reglas de la norma 028 que deben cumplir los centros de rehabilitación son: contar con camas suficientes para todos los internos, un baño para cada ocho personas, cocina limpia, que las instalaciones de gas y electricidad sean seguras contra accidentes.
También que los espacios sean suficientemente amplios para recrearse no sólo para ir a recibir terapia y que cuenten con suficientes terapeutas y consejeros para garantizar el mejoramiento de la condición física y mental de los usuarios, así como determinado número de horas de actividades asignadas diarias para cada interno.
La regulación se apega a los derechos de los usuarios y de los establecimientos por lo que cuentan con permiso de uso de suelo, carta de opinión favorable de Protección Civil, además, los centros de rehabilitación certificados son inspeccionados por la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepriss), así como por la Comisión Estatal para Prevención y Control de Adicciones (Cepca).
Javier Pellegaud Cervantes añadió que como Federación de centros de rehabilitación de Sinaloa apoyan la decisión del gobierno municipal de Ahome de exigir a los establecimientos irregulares, que son la mayoría, que se certifiquen, pues la regulación adecuada genera calidad en el tratamiento de los adictos.
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Y es que lo más peligroso para una persona consumidora de drogas que es internada en un centro de rehabilitación pero que no recibe el tratamiento adecuado, como en cualquier enfermedad, el riesgo es que la enfermedad empeore con más fuerza, puntualizó el especialista en adicciones.
