Culiacán, Sin.- Después de una exitosa intervención quirúrgica en uno de sus ojos, el gobernador Rubén Rocha Moya no perdió tiempo y se reincorporó a sus actividades de manera espontánea.
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Al volver al Palacio de Gobierno, Rocha Moya decidió visitar varias oficinas en el sótano y la planta baja del edificio. Su intención era saludar personalmente a los trabajadores y expresar su agradecimiento. Durante estas visitas, las charlas fueron amenas y cordiales, y los empleados compartieron su alegría por la rápida recuperación del gobernador luego de la cirugía de cataratas.
En este contexto, una imagen se destaca en particular: la fotografía con Alejandro Ruiz, reconocido como El Chapito de Palacio de Gobierno. Alejandro se ha convertido en un auténtico ícono dentro del edificio estatal, pues durante muchos años ha sido el vendedor de dulces, refrescos y aguas en el sótano.
Con su amabilidad y sentido del humor, “Los Chapitos” siempre alegran a los visitantes de la unidad administrativa del Gobierno del Estado en Culiacán, donde desde hace 14 años mantienen el estanquillo en el que también sacan copias.
En las redes sociales interpretaron la imagen de Rubén Rocha Moya y Alejandro Ruiz como un elemento que refuerza la idea de que un líder empático y conectado con su comunidad.
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Otros han expresado que esta historia ilustra la importancia de reconocer y valorar a quienes, como Alejandro, contribuyen de manera significativa al ambiente y la identidad de un lugar tan emblemático como el Palacio de Gobierno.