Los Mochis, Sin. – Ante el incremento en la petición de instalar reductores de velocidad en las instituciones educativas públicas y privadas, el jefe del departamento de vialidad en Ahome, José Alfredo Gutiérrez Rivera, informó que se quedaron sin presupuesto, por lo que están pidiendo a las escuelas que cubran los gastos.
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Gutiérrez Rivera dijo que, sin lugar a dudas, los reductores cumplen con su función, ya que se trata de boyas altas, que obligan a los conductores a reducir la velocidad al mínimo, al momento de pasar frente a los planteles educativos.
La instalación de las boyas, la elaboración de señalamientos y la pintura para la guarnición de las escuelas, tiene un costo que oscila entre los cinco y los diez mil pesos por institución.
“En cuánto a reductores escolares, se les está pidiendo a ellos (las escuelas), que pinten la guarnición, pongan los señalamientos y pongan los reductores, por qué nosotros no tenemos ese presupuesto de momento… pero donde se están poniendo, pues sí, están funcionando, porque son unas boyas por las que necesitas pasar muy despacio”, apuntó.
José Alfredo Gutiérrez dijo que, de momento, el Ayuntamiento de Ahome y en particular el departamento de vialidad no cuenta con el recurso suficiente para cubrir este gasto, por lo que se está pidiendo a las escuelas que sean ellos mismos quienes paguen por los reductores, para evitar el riesgo de sus estudiantes.
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Cabe resaltar que los planteles educativos han aumentado la demanda de reductores debido a que los automovilistas no respetan los límites de velocidad exponiendo a riesgos a los alumnos, docentes y padres de familia.
