Culiacán, Sin.- El secretario de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Culiacán, Sergio Antonio Leyva López, salió en defensa de los policías que detuvieron a un chofer del transporte urbano, su hijo y a una mujer, en hechos ocurridos el pasado miércoles en el centro de la ciudad.
El trabajo de los agentes fue el correcto y en cumplimiento al reglamento de la corporación, sin embargo, se abrió una investigación a dos elementos señalados por las víctimas, y será hasta que concluyan las indagatorias cuando se determine si se aplicará alguna sanción, pero mientras tanto ellos seguirán en su trabajo, sostuvo el jefe policiaco.
Desde su punto de vista, precisó que la detención del conductor fue por traer a su hijo en el camión cuando esto no lo permite el Bando de Policía y Buen Gobierno, y a la mujer por obstruir el trabajo de la autoridad municipal.
Con relación a los golpes que presuntamente recibió el chofer en la celda, Leyva López lo negó, ya que el médico de Barandilla no lo acreditó ante el juez al momento de dejarlo en libertad después de 12 horas, además de que nunca se violaron los derechos a los detenidos.
“Inmediatamente el día de ayer (miércoles), como siempre, respetuosos de los derechos humanos de la persona y dentro del marco jurídico, inmediatamente se abre una investigación interna en la corporación. En ningún momento se mira que golpean a la persona, fue tratar de controlar, porque es muy diferente someter a controlar”, sostuvo.
Asimismo, el jefe de la policía en la capital sinaloense dijo que los tres detenidos están en su derecho de acudir ante la Fiscalía General de Justicia y de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Sinaloa, si así lo consideran.
Los hechos y la réplica de la autoridad municipal
El incidente ocurrió en la esquina de la avenida Domingo Rubí y la calle Rafael Buelna durante la tarde de este miércoles en el primer cuadro de la ciudad.
De acuerdo a la información, el conductor del camión número 9 de la ruta Tierra Blanca-San Miguel, se paró en dicha esquina, en donde un joven familiar del chofer empezó a limpiar los vidrios.
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Los policías que patrullaban la zona se percataron de la situación y abordaron al trabajador del volante para indicarle que el joven que hacía limpieza a la unidad quedaría retenido por tratarse un presunto “garbanzo” (como se les dicen coloquialmente a los compañeros de los choferes).
Debido a que el chofer del camión urbano no acató un mandato de la autoridad, se decretó su detención, al igual que de un menor de edad que lo acompañaba como apoyo para limpiar el transporte.
Una mujer que presenció estos hechos intervino en defensa de estas personas, “entorpeció la labor de los oficiales”, motivo por el cual también fue detenida por policías mujeres que, aseguró la dependencia, “cumplieron con los protocolos de actuación”.
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Los tres fueron trasladados a las instalaciones de la SSPyTM y después se pusieron a disposición del Tribunal de Barandilla, donde un juez determinó excluir de responsabilidad a la mujer y al menor de edad, y ordenó su inmediata libertad.
Solo quedó detenido el chofer del camión urbano y se determinó una sanción de 12 horas de arresto por faltas al Bando de Policía y Gobierno.
