Guasave, Sinaloa. No se puede permitir que la labor administrativa de la Jumapag sea secuestrada por el Sindicato que lidera Israel López Cortez, señaló el gerente general Gilberto Leyva Cervantes, ante las demandas del gremio que los llevó a parar labores este miércoles en un plantón en el Palacio Municipal.
Y es que según el funcionario, había diálogo y buena relación entre la parte patronal y el Sindicato hasta que no se permitió que se sindicalizaran a familiares del líder a petición del mismo.
Leyva Cervantes expuso que ellos como administración al frente de la Junta tienen la última palabra en aceptar las propuestas para nuevas plazas, y si no caben en los perfiles que el Sindicato propone, no pueden aceptar. Además, recalcó que reconocen el adeudo histórico que se tiene, pero no pueden solventarlo porque estarían en riesgo los salarios de los trabajadores y el funcionamiento administrativo de la paramunicipal.
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“Nosotros somos la parte patronal y decidimos quienes nos sirven, si tienen el perfil o no. Ha propuesto a familiares y no familiares, ahí en el tema de cómo se manejan ellos en su gremio, como empresas somos responsables de que nuestros usuarios no salgan afectados, ahorita están siendo afectados por estas situaciones. No les hemos quedado mal en sueldos y prestaciones, reconocemos el adeudo histórico, pero pagamos sueldos o el adeudo”, expresó.
En cuanto a los pasivos que se deben de otras administraciones, Gilberto Leyva puntualizó que se han estado pagando cada quincena por grupos, empleados sindicalizados que el mismo gerente enlista para que se les abone parte de ese adeudo.
Sin embargo, pese a que se ha avanzado en solventar esas demandas, el gerente precisó que desde el viernes pasado las multifuncionalidades que se habían asignado a trabajadores de base en distintas áreas se paralizaron por órdenes del secretario general, lo que los obligó a reforzar el trabajo con el personal de confianza.
Incluso, dijo que en la planta de agua que suministra la ciudad también estuvo en riesgo, asimismo sucedió con las unidades de las brigadas de reparación de fugas y drenajes.
De no tomar medidas serias con responsabilidad, esta empresa no tiene mucho futuro, señaló el gerente general de la Junta de Agua Potable, al precisar que si no se cuida cediendo a peticiones que ponen en riesgo a la paramunicipal, llegará a la quiebra a corto plazo.
El alcalde Martín Ahumada Quintero, cuestionado al respecto precisó que se escucharán las demandas del Sindicato y buscarán el diálogo y los acuerdos necesarios para evitar que se ponga el riesgo el servicio a la población.