Guasave, Sin. – Cientos de flores rodean su féretro, familiares y amigos allegados muestran sus condolencias a la familia por la pérdida de Luis Humberto; su muerte dejó una familia destrozada, son los comentarios de quienes asisten al funeral en la sindicatura de la Trinidad.
El portal de su casa está lleno de gente que acude a darles el pésame a la familia; su padre, el líder campesino, Roberto Valdés, saludando a quienes llegan a brindarles apoyo moral por el sensible fallecimiento de su hijo.
A la madre, esposa e hija de Luis Humberto no se observó, pero los más allegados aseguran que no se han despegado del féretro donde descansan sus restos.
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Amigos de Luis, compañeros de la preparatoria, a quienes conocía desde el kínder, lloran su partida, y, cuentan que en la última posada que sostuvieron en días pasados, les dijo una frase que por siempre recordarán “cuando yo me muera, no me pidan que los cuide”, le gustaba bromear con todos, era el más “llevado”, comentan.
Era respetuoso y educado, su padre era su ejemplo, y hoy a escasas horas de su partida, solo recibe flores blancas y rojas, que adornan el portal de su casa y a su alrededor.
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Afuera una carpa blanca con sillas, que ocupan quienes se han acercado consternados por la pérdida de Luis, y donde comentan que, sin duda, el inicio de año para esta familia no será el mismo.