Culiacán, Sin.– Ramón parece sonreír. Detrás de unas mujeres husmea en algo. Su pelaje blanco y amarillo junto a su tamaño llaman la atención. Sin embargo, se las ingenia. Se escabulle y llega hasta donde está una botella de refresco de cola. Con su hocico lleva abajo a la botella, pero esta rueda para escaleras abajo.
Ramón voltea y reanuda lo que parece su sonrisa. Más tarde, Vicky pregunta por su refresco. Ramón solamente mueve la cola, se ve contento. En verdad parece sonreír. Su travesura fue evidenciada, hubo testigos que lo delataron.
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Ramón es uno de los lomitos puestos en adopción por la asociación civil Patitas Médicas. Fue rescatado de un entorno donde pretendían forzarlo a participar en peleas de perros. Es un bull terrier inglés. Junto a él toda una manada de lomitos. Unos pequeños, otros medianos, otros de talla grande. Todos buscan un hogar.
Así lo explica Amy Gil, integrante de la agrupación que la tarde del sábado 9 de diciembre realizaron una feria de adopción canina, así como un encuentro entre colectivos y un concurso de disfraces navideños celebrado en una plaza del sector Tres Ríos.
“Esos perritos se van a ir en adopción con la familia más predilecta, ¿qué quiere decir? Que les pedimos ciertos requisitos para adoptar, sus identificaciones, compromisos, esterilización que es obligatoria, nosotros no permitimos la cruza porque así acabamos con el abandono, el maltrato animal y que los animalitos sigan en las calles”
El concurso es un pretexto para las travesuras de los lomitos. Un chihuahua disfrazado del “Grinch” porta sus lentes oscuros. Posa a la cámara. Está en personaje.
La asociación se ha dedicado al rescate de perros con atenciones médicas y tratamientos, también programas de esterilización y vacunación e incluso quimioterapias.
Por eso este tipo de eventos sirven tanto para la causa y lograr acopio de alimentos, sobre todo, como también de concientización sobre una tenencia responsable.
