El Rosario, Sin.- La falta de lluvias en la zona de la Laguna del Caimanero está generando pronósticos adversos para la temporada camaronera 2023-2024, toda vez que ante la falta de agua dulce, la alta salinidad que contiene el cuerpo de agua está matando el camarón y pescado.
Luis Enrique Zambrano, presidente de la cooperativa La Guásima, mencionó que aún no hay fecha para el levantamiento de la veda y que la laguna tiene agua suficiente porque se abrió la boca al mar, pero el líquido es salado y está matando el producto.
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“(Que llueva pronto) Es la esperanza de nosotros, porque ahorita como se ve, no tenemos camarón, se nos murió el camarón, se nos murió el pescado por tanta sal que tiene el agua, tiene un 70 por ciento de salinidad y estamos un poquito decepcionados, pero nos mantiene una esperanza”.
El líder pesquero comentó que están a la espera de un milagro, porque todavía queda la mitad de agosto y septiembre, tiempo en el que Dios los puede sorprender con suficientes lluvias para que entre el camarón grande se reproduzca y puedan cambiar los pronósticos a favor de los pescadores.
En la Laguna del Caimanero trabajan alrededor de mil 500 pescadores integrados en 16 cooperativas, además de los libres que se suman a la actividad, y ante la situación que están avizorando, temen que esta temporada se pierda su fuente de ingresos.
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Luis Enrique Zambrano comentó que el próximo 2 de septiembre tendrán una reunión con diputados del Congreso del Estado, a quienes les pedirán que gestionen algunos apoyos ante el gobernador Rubén Rocha Moya para mitigar los efectos de una crítica producción camaronera.
