Los Mochis, Sin.- Para que la escuela primaria “General Ignacio Zaragoza”, de Agua Caliente de Baca, Choix, tuviera una rehabilitación y atención por parte del Gobierno del Estado, tuvieron que pasar 60 años, los últimos 4, fueron de lucha y unidad entre docentes, padres de familia y alumnos para buscar tener aulas dignas: las que tenían, se estaban cayendo a pedazos.
Será este lunes 6 de marzo que los 45 niños de las comunidades de Agua Caliente de Baca, Conicari y El Garabato, regresarán a sus nuevas aulas, las que quedaron “bonitas y seguras”, por lo que no caben de felicidad.
Luis Eduardo Gámez Sánchez, director de la escuela primaria, señala que los alumnos estuvieron estas últimas semanas sumamente inquietos e impacientes, porque, luego de que un pedazo del techo lesionara a uno de los pequeños en el 2019, tomaban clases en una bodega.
El docente recordó que durante toda la pandemia los maestros, papás y alumnos estuvieron trabajando de manera presencial porque la comunidad carece de señal telefónica y, por supuesto, ahí no hay internet; la educación a distancia no era una opción para los niños.
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Es por eso que, sumamente felices, el director de la institución educativa, Luis Gámez agradece al gobernador haber atendido de manera personal la escuela tras escuchar el caso que fue denunciando por padres de familia ante Línea Directa.
“En nombre de tanto de la comunidad de Agua Caliente de Baca, como de padres de familia, alumnos y el personal docente, agradecemos al gobernador, el doctor Rubén Rocha Moya, por cristalizar y hacer posible que este sueño se cumpliera, que nuestros alumnos tengan unas aulas de calidad, un espacio digno para recibir educación”.
“Estas obras son de un gran sentido humano porque vienen a revolucionar y a modificar la vida de los niños, porque, sin duda alguna, este es un beneficio que no tenemos palabras para describir la felicidad que sentimos porque fueron cuatros de lucha, de tocar puertas y hasta ahora vemos cristalizar este sueño”, dijo el maestro.
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Luis Gámez añadió que el grave daño estructural que presentaban las anteriores aulas que fueron derribadas, no fue por vandalismo o descuido de los papás y maestros; fue porque a las anteriores administraciones de Sepyc se les olvidó la escuela.
Por ello, reiteró que la rehabilitación se da tras 60 años, algo histórico para la comunidad enclavada en la parte alta de la sierra de Choix.
