Emiliano, el niño sinaloense de las gorras, se volvió todo un empresario

Culiacán, Sin.– Cuando Emiliano tenía 6 años emprendió un proyecto que en principio era más un juego, pero que poco a poco se convirtió en un negocio familiar muy exitoso. “Emibeads” es una realidad que este 15 de noviembre cumple 3 años de existir y que cada día tiene más clientes que buscan sus coloridas gorras.

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Con figuras como Mario Bros, Sonic, Pokemón, Batman, el pequeño Grogu, o Elmo de Plaza Sésamo, por mencionar algunos de los personajes, las cachuchas se han vuelto la sensación entre chicos y grandes, no sólo de Culiacán, Sinaloa de donde es originario Emiliano, sino de muchas zonas del país.

 

A 3 años de la aventura, Emiliano recuerda qué empezó haciendo diseños con “beads”, es decir, unas pequeñas figuras de plástico.

Al ver que el niño resultó muy bueno ensamblando las piezas, a su papá se le ocurrió pegar uno de sus primeros diseños en una gorra, lo cual llamó la atención de sus compañeros de escuela y amigos, quienes le hicieron encargos, a tal punto que comenzó una pequeña línea de producción y en menos de lo pensado, ya estaba participando en exposiciones y bazares.

Eso por supuesto, ha puesto muy contento al pequeñín que aspira a ser un gran empresario.

“Me siento bien, me gusta que las personas tengan algo que yo hice y que les guste, me siento muy bien viéndolas, que les guste, que me digan: ¡a que bonito está!, ¡me encantó esta gorra!”, expresó Emiliano entrevistado por Línea Directa.

 

Aunque de momento trabaja sobre pedido, confiesa que su sueño es tener un punto de venta fijo y luego expandir el negocio en sucursales para que sus creaciones lleguen a más personas.

“Mi mayor meta es hacer como una tiendita. Un decir, la tienda sería algo así como que ahí elijes tu gorra, el diseño, tamaño, color”…

–¿Cuántas gorras haces al día?

“Al día hago como 5”

–¿Cuánto te tardas en hacer una gorra como la de Elmo, por ejemplo?

“Cómo diez minutos”

— ¿Y los más elaborados cuánto tardas en hacerlos?

“Como una hora y media”.

Contenido de Twitter

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Además de un negocio, para él ha sido una terapia pues durante la pandemia se mantuvo ocupado trabajando y fue más fácil hacer frente al encierro, tanto para él como para el resto de su familia.

La señora Karla Arellano, mamá de Emiliano, fue pieza clave del negocio, pues comenzó a subir algunas fotografías de las gorras a Instagram, lo cual terminó siendo un boom que incrementó los pedidos.

Ahora hacen más 100 gorras al mes y han tenido que modificar algunas áreas de la casa para instalar una línea de producción formal.

 

“En noviembre recuerdo que íbamos a las piñatas de los amigos de Emiliano y era llevarle una gorra con el regalito, entonces el niño se la ponía, le tomaban fotos, la subía a redes y ahí mismo le preguntaban: ¡Oye! ¿tienes de Marshmello? ¿Tienes de Pikachu?; yo le decía: Tu dice que sí Emiliano, vamos a buscar plantillas y las vamos a hacer y así empezó como juego, eso fue en noviembre, para diciembre ya teniamos 100 gorras pedidas; entonces llegábamos del trabajo y la escuela mi esposo, el niño y yo, empezábamos a ensamblar y fueron muchas noches de desvelo pero lo bonito de esto es que eran en familia”, comentó

A pesar del éxito Emiliano sigue yendo a la escuela y poniéndole muchas ganas, sabe que si quiere lograr sus metas y convertirse en un gran empresario debe estudiar mucho y no descuidar sus estudios, por lo que junto a su mamá han establecido horarios.

Contenido de Instagram

El mensaje que Emiliano le manda a quienes deseen tener una empresa como la que él ha venido desarrollando es que no desistan, que persigan sus metas con disciplina, pasión y mucho esfuerzo.

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“Me encanta mucho mi proyecto y me encantaría que niños que quieran tener su propio negocio cumplan sus sueños y metas”, recomendó.