Mazatlán, Sinaloa. El mundo está viviendo una glorificación de la narcocriminalidad y ello está confundiendo a los jóvenes a través del contenido que observan en las diferentes plataformas de comunicación y redes sociales, advirtió el hijo de Pablo Escobar Gaviria, Juan Sebastián Marroquín.
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El conferencista, quien mañana jueves disertará su charla “Una historia para no repetir”, con la que va a compartir su experiencia de vida, este miércoles sostuvo una plática con representantes de medios de comunicación de Mazatlán, ante quienes dijo que las series televisivas hacen creer que el camino al éxito está por la vía del crimen, pero esto no solo ocurre en México, sino que en muchos otros países de Europa y Latinoamérica es la misma tendencia.
Ante esta falsa idea, dijo que su intención al impartir conferencias es dejar a los jóvenes un mensaje con la historia de su papá y cómo muchas veces el mundo del crimen no es como se imaginan a partir de las historias televisivas, y por ello insistió en que su padre, Pablo Escobar “tuvo todo el dinero del mundo, pero no pudo comprar un minuto de paz”, y por ello rechazó ser la segunda versión del conocido líder del cartel de Medellín.
“Cuando él muere estuve a punto de cometer el error de convertirme en ese Pablo Escobar 2.0 que todo el mundo esperaba que yo me convirtiera. Y justamente, de haber sido testigo de primera mano de todas las consecuencias de sus acciones, de la pérdida de nuestra libertad, de aguantar hambre mientras teníamos millones en efectivo, entendí claramente que, si yo continuaba con el camino de mi padre, yo no iba a llegar a ningún lado”.
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Sebastián Marroquín precisó que se debe conocer bien la historia del crimen para no caer en los mismos errores que generan violencia y destrucción, por lo que espera que su testimonio les sirva a todos los jóvenes para hacer un cambio positivo, y que descubran que hay otras formas de alcanzar el éxito como.
Advirtió que, a 30 años del fallecimiento su padre, el mundo de las drogas siguen igual, lo único que cambia son los jefes e incluso hay más sustancias nocivas para la salud.
“Seguimos igual o peor. Hoy tenemos más drogas que nunca antes en la historia de la guerra contra las drogas, así que no ha cambiado nada, solamente los protagonistas”.
Juan Sebastián Marroquín agregó que la única manera de cambiar esta problemática es con la educación que se imparte en las escuelas, así como la que dan las familias a sus hijos, para que las nuevas generaciones tomen conciencia y no crean que es verdad lo que ven en todas las pantallas de televisión y redes sociales.