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Mazatlán, Sin.- Ante la urgencia de reparar los daños que en la red de distribución en la zona rural causaron los huracanes Nora y Pamela, personal de Jumapam emprendió una evaluación de las averías y el daño por antigüedad, en cinco pueblos, para dictaminar cómo se procederá para atender cada caso y mejorar el suministro del agua potable.
Luis Gerardo Núñez Gutiérrez, gerente general de Jumapam, indicó esta situación es establecer la forma de resolver los problemas que se siguen generando, en varios pueblos como El Chilillo y otras comunidades de la zona rural de Mazatlán.
“Venimos de un recorrido de lo que es San Marcos, La Noria, El Salto, Los Limones y El Habal, estamos viendo algunos problemas que quedaron del último meteoro, que fue Pamela, y estamos viendo las necesidades básicas del tema del agua; algunas ya están reparadas pero no en su totalidad y venimos a ver qué es lo que está haciendo falta”, comentó el Ingeniero
El Gerente General de Jumapam destacó que debido al cambio de reglas de operación de programas federales como el Fonden, los recursos solicitados para resarcir los desperfectos registrados entre septiembre y octubre podrían llegar hasta febrero del próximo año y un servicio tan básico como el abasto de agua no puede esperar tantos meses.
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Agregó que han hecho reparaciones provisionales para mantener el servicio, sin embargo, la instrucción del alcalde es resolver con obras definitivas.
Entre los daños más impactantes, destacan los destrozos del camino vecinal Chilillo-Puerta de Canoas, donde las lluvias torrenciales dejaron descubierto la red que abastece de agua a El Habal, Los Limones y La Puerta de Canoas, una tubería de 6 pulgadas estaba a metro y medio de profundidad, y ahora está expuesta, por lo que esta misma semana será cubierta, para evitar que se dañe.
