Culiacán, Sin.- Iniciar en el área de la investigación es más difícil para una mujer, pero aún así han logrado llevar a cabo algunos proyectos como la investigación de un fruto que pudiera ayudar a combatir la diabetes, así como el tratamiento de aguas residuales, coincidieron Adriana Roé Sosa y Marely Graciela Figueroa Pérez, integrantes del Sistema Nacional de Investigadores por Conacyt.
Marely Graciela Figueroa Pérez, detalló parte de la investigación como ingeniera en agricultura sustentable y protegida.
“La que estoy realizando personalmente es un proyecto financiado por CONACyT, es un fruto que se llama uchuva uvilla, es como, muy parecido al tomatillo que conocemos aquí en Sinaloa, pero es dulce, de hecho lo conocen como un fruto exótico en Estados Unidos y Europa, tiene un sabor parecido entre el arrayán y la guayaba, algo así, y se ha descubierto que tiene propiedades benéficas como la diabetes, y es un fruto que crece como maleza”, indicó.
Explicó que aunque no ha sido nada fácil desarrollarse en el ámbito de la ciencia, ha sido muy productivo y fascinante el mundo de la investigación.
“Lo más difícil lo he vivido en los últimos dos años, que fue cuando tuve a mi bebé, yo decía: no, somos iguales, la brecha no está tan grande, las oportunidades ahorita, hoy en día son las mismas, pero no, ya cuando te conviertes en mamá y en jefa de familia, tener que llevar tu casa, aunque se involucre mucho tu esposo, hay cuestiones que uno como mujer lo tiene que hacer, y al mismo tiempo mantener tu trabajo, tu proyecto, tus estudiantes, tus materias, todo eso al mismo nivel, sí es un trabajo doble” señaló.
Por su parte, la especialista en tecnología ambiental, Adriana Roé Sosa, habló sobre la creación de nuevos procesos para limpiar lo contaminado como las aguas residuales, residuos sólidos urbanos o basura, el aire y los suelos.
“Estamos trabajando lo que le comentaba del tratamiento de agua con plaguicidas, en un distrito de riego se construyó un humedal chiquito piloto, y ahorita pues este año la meta es esa, empezar a tocar puertas con diferentes empresas, agricultores que nos están escuchando que esté interesado para empezar a contribuir con ese granito de arena”, dijo.
Incluso, dijo que uno de los logros que recientemente están consolidando, es la realización de del sexto congreso Internacional del agua, a realizarse en la Universidad Tecnológica de Culiacán, de donde son docentes.
“Vengo de una familia que me cuidaban mucho, y luego decían: la dejaste ir y anda en la basura porque me tocaba ir al relleno sanitario, a las plantas de composta, que también es un área difícil y no cualquier mujer va aceptar a esos lugares, tienen que vivir esa experiencia, el lugar que huele mal, porque no hay un buen manejo de los residuos, para que se interesen en buscar otras formas de que la podamos manejar y no huela mal”, explicó.
Adriana Roé Sosa y Marely Graciela Figueroa Pérez, integrantes del Sistema Nacional de Investigadores por CONACyT, añadieron que el mundo de la investigación, por más que se base en la objetividad y la imparcialidad, padece como mínimo la misma desigualdad de género que otros ámbitos de la sociedad.