Culiacán, Sinaloa.- Después de recibir el báculo que es el signo del pastor que lo acredita como nuevo obispo de la Diócesis de Culiacán, monseñor Jesús José Herrera Quiñónez agradeció al papa Francisco y al nuncio apostólico de México, monseñor Joseph Spiteri, tal distinción para representar a la comunidad católica de Sinaloa.
Nota relacionada: Joseph Spiteri le dio posesión: Jesús José Herrera es el nuevo obispo de la Diócesis de Culiacán
La celebración religiosa se llevó a cabo este jueves 23 de noviembre en la Basílica de Nuestra Señora del Rosario (Catedral) y posteriormente una celebración eucarística de inicio de Ministerio Episcopal en las instalaciones del Polideportivo del Colegio Sinaloa, campus Horizontes, con la asistencia de obispos de varios estados de la República, algunos presbíteros, diáconos, religiosos y laicos de la diócesis de la capital sinaloense, quienes se acercaron al nuevo obispo para saludar y darle la bienvenida a Sinaloa.
Nacido en la ciudad de Mexicali, Baja California, y con 62 años cumplidos, el excelentísimo Jesús José Herrera Quiñónez dijo que hoy fue elegido quinto obispo de la Diócesis de Culiacán, ante ello, ofreció ser una persona que respetará a toda la comunidad católica, lo que provocó el aplauso de los cientos de asistentes.
Recordó que fue el pasado 21 de septiembre cuando se publicó su nombramiento, pero guardó el secreto una semana. Saber que iba a relevar en esta humilde responsabilidad al hoy obispo emérito Jonás Guerrero Corona, quien estuvo por 12 años a cargo de esta responsabilidad.
Nuevo obispo de la Diócesis de Culiacán, monseñor Jesús José Herrera Quiñónez. / Foto: Jesús Verdugo
En su mensaje, comentó ser consciente que desde que el papa lo nombró con esta nueva responsabilidad que anteriormente la tenía en Nuevo Casas Grandes, Chihuahua, todos han orado por el fruto de su ministerio episcopal y que el señor los recompense, por eso este día, expresó, se presenta pobre y humilde con la inevitable sensación de que las expectativas que tienen sobre él son muy superiores a lo que se puede esperar de este humilde servidor de Dios.
Admitió que como ser humano también es vulnerable, ante ello, pidió la ayuda a la comunidad cristiana y a los sacerdotes de la diócesis para cumplir esta misión que la iglesia le encomienda.
“La única motivación válida para asumir esta misión es el amor y la confianza que tengo puesta en Jesús. Que no nos dejemos vencer por el desánimo y la desilusión ante las dificultades del tiempo presente. Si logramos caminar juntos anunciando el evangelio y dando testimonio de Cristo en la verdad como nos lo pide la sinolidad de la iglesia lograremos vencer los obstáculos, y con una iglesia de salida y de puertas abiertas para que todos encuentren en ella un lugar de respuestas a sus inquietudes más profundas”, resaltó el obispo Jesús José Herrera.
Nuevo obispo de la Diócesis de Culiacán, monseñor Jesús José Herrera Quiñónez. / Foto: Jesús Verdugo
Te sugerimos: El representante del Papa en México llega a Sinaloa: Spiteri dará posesión al nuevo obispo de Culiacán
En su participación, el nuncio apostólico de México, monseñor Joseph Spiteri, felicitó a la comunidad católica de Culiacán por su nuevo padre obispo y la forma de recibirlo en esta congregación que será para bien de todos, ya que don Jesús José continuará la labor de Jonás Guerrero Corona, que los acompañó como pastor durante los últimos 12 años.
“La misión del obispo, como lo sabemos, no es sencilla, pero ciertamente goza de bendiciones particulares para facilitar el cumplimiento de las tareas de este don del Espíritu Santo, el gozo sincero de todos ustedes, queridos hermanos, al recibir a su nuevo obispo, muestra el cariño y el respeto con el cual se reconocen los honores que le corresponden como representante de Jesucristo nuestro señor como cabezas de la Iglesia”, expuso.
Finalmente, monseñor Joseph Spiteri invitó a los presentes a acompañar a su nuevo obispo cada día en esta nueva misión, como lo han acompañado en su servicio episcopal en Nuevo Casas Grandes, Chihuahua, ahora les corresponde a las hermanas y hermanos de Culiacán caminar en comunión con su obispo en confianza y en la presencia y las bendiciones del señor como lo han hecho los sacerdotes.
