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Estados Unidos.- Las múltiples mutaciones del COVID-19 y su acelerada propagación ha llevado a que varios países decidan implementar dosis de refuerzo para combatir la emergencia, iniciando por la población más vulnerable y con la intención de que todos sus habitantes reciban al menos tres dosis de la vacuna.
No obstante, ante la gravedad del asunto hay quienes han optado por dar paso a una cuarta y hasta quinta dosis del biológico. Situación que ha sido para nada del agrado a los funcionarios de la Organización Mundial de la Salud, quienes recientemente arremetieron contra estos países, señalando que más allá de la cantidad de dosis que pueda recibir una misma persona, es más importante afanarse en inmunizar el total de la población.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus invitó a la población mundial a terminar con la desigualdad que se vivió el año pasado frente a este asunto, diciendo:
A la velocidad actual, 109 países del mundo no podrán cumplir la meta de tener al 70 por ciento de su población vacunada para mediados del 2022. La esencia de la disparidad es que algunos países están procediendo a una cuarta vacunación, mientras que otros ni siquiera han podido vacunar a sus trabajadores sanitarios.
Debemos zanjar las desigualdades del año pasado.
Por otra parte, el director de la OMS insistió en que es inútil aplicar una cuarta dosis de la vacuna si no se tiene a la mayoría de la población vacunada, pues esto no evitará su constante propagación y mutación, explicó:
Refuerzo tras refuerzo, estos países no le pondrán fin a la pandemia mientras haya millones de personas sin inmunizar en el resto del mundo.
Mientras tanto, el mundo entero experimenta una situación crítica con un repunte significativo en casos positivos de COVID-19 y de su nueva variante, Ómicron.
