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La democracia entre desiguales es casi una utopía y a pesar de sus relativos avances, las inequidades, por simple lógica, permanecen.
De nuevo, se informa que de enero a noviembre de 2021, la banca comercial tuvo ganancias por 162 mil millones de pesos, una cantidad sin precedentes, la más alta concentración de beneficios desde que se empezaron a dar a conocer esos datos, que por ley deben ser públicos.
Esa “ganancia” (un abusivo eufemismo) es superior en un 54.2 por ciento a los 98 mil millones de pesos que tuvieron en el 2020, con todo y pandemia, según las oficiales cifras de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
La crisis sanitaria, como se ve, le hizo lo que el viento a Juárez a los bancos “mexicanos”, a costa (y con el dinero) de los millones de usuarios cautivos de una bancarización cuyo beneficio social (dada la forma en que opera) debe ser discutido.
LOS GANANCIOSOS ¿ETERNOS?
De acuerdo con los mismos datos de la CNBV, el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria(BBVA) que se fundó en 1857 en Bilbao, España, convertido en México en el Grupo Financiero BBVA Bancomer, luego de que este se le afilió, fue el que más ganó.
BBVA es el banco con mayor presencia en el país y reportó utilidades, entre enero y noviembre de 2021, de 53 mil 618 millones de pesos, un incremento de 60.5 por ciento con respecto al año anterior (2020).
De esa manera, ese banco concentra el 33.11 por ciento de las ganancias totales del sector. No por nada, sus altos ejecutivos españoles presumen que en México ganan más del doble que en su país de origen y matriz.
Aquí los dejan hacer lo que les da la gana y cobrar por lo que sea, al igual que sus competidores.
Santander se embolsó nada más 16 mil 72 millones de pesos en el mismo lapso, Citibanamex 18 mil 113 millones de pesos y Banorte llegó a 23 mil 787 millones de pesos. Nada mal en menos de un año.
Del resto de bancos, a ninguno le fue mal, sino de lo mejor, en proporción a su capital, cobrando interés sobre interés y por lo que sea.
Y así van al 2022, dichosos y contentos, mientras el gobierno “anti neoliberal” se los permita.
¿PARA FESTEJAR?
En efecto, las remesas de mexicanos que trabajan en el extranjero, particularmente en Estados Unidos (también los hay en Europa) llegaron a cuatro mil 665 millones de dólares durante el pasado mes de noviembre. En conjunto, hubo un incremento anual del 37.7 por ciento, reporta el Banco de México.
Entre enero y noviembre del año que pasó las remesas llegaron a 46 mil 834 millones de dólares, más del 26.7 por ciento en relación al 2020.
Como los datos cierran a noviembre del año pasado, es casi seguro que al finalizar diciembre la cantidad llegue a más de 50 mil millones de dólares.
Esa cantidad no tiene precedente y las remesas se han convertido en la principal fuente de divisas para México, más que las exportaciones y la inversión extranjera directa.
La cuestión es: ¿eso es para festejar o, antes al contrario, para evaluar y reconocer el atraso que padecemos, la inequidad en el ingreso nacional, la falta de fuentes de trabajo y un ingreso digno, pese a los aumentos que pulveriza la privada iniciativa?
EN EL TINTERO
-Que en Brasil “murió la primera persona por el COVID Ómicron”, se difunde, y al final de la nota se aclara que, “de acuerdo con las autoridades, la víctima mortal tenía comorbilidades tales como hipertensión arterial y enfermedad pulmonar crónica”. Lo dicho.
-Este escribiente tiene años publicando, en este medio y también en algunos de los llamados “nacionales” (de la CDMX, pues) que sin solución alguna (todos se hacen de la vista gorda) continúa la violación a la Constitución por parte del gobierno en los llamados “retenes”, mismos que propician la criminalidad en lugar de combatirla efectivamente. Al respecto, sólo la desvergüenza oficial. ([email protected]).
