Al momento

Para no olvidar

Culiacán, Sinaloa, 31 de mayo 2021. Hace 21 años, en el 2000, los excesos neoliberales y el seguimiento acrítico de las directrices globalizantes provocaron que el...

| Internet

Culiacán, Sinaloa, 31 de mayo 2021. Hace 21 años, en el 2000, los excesos neoliberales y el seguimiento acrítico de las directrices globalizantes provocaron que el poder adquisitivo del salario en México se encontrara en su nivel más bajo desde 1935, cuando se estableció el salario mínimo.

Se había perdido el 76.6% de la capacidad de compra y la tendencia continuó hasta hace apenas dos años, con los históricos aumentos en el gobierno de AMLO.

En contraparte, a finales del gobierno de EPN, y de acuerdo con indicadores oficiales, las grandes empresas mexicanas incrementaron sus márgenes de ganancia de manera extraordinaria.

Se entiende, entonces, sin sombra de duda, el malestar del capital, nacional y extranjero, por las medidas impulsadas en el gobierno de López Obrador.

QUIEREN SEGUIR EXPLOTANDO

Los grandes ricos siguen ganando, y mucho, pero quieren más, regresar al pasado y eliminar las acciones para hacer de México un país más equitativo, menos desigual.

En el 2000 y años subsiguientes, con el salario mínimo se podía adquirir solo una tercera parte de la canasta básica y la tendencia siguió a la baja, hasta que Morena ganó las elecciones impulsando el mejoramiento salarial y los apoyos a los sectores más vulnerables.

En la actualidad, pese a que la voracidad comercial y empresarial privada no se ha ido, el poder adquisitivo se ha incrementado y en el próximo año será mayor.

Es por eso, precisamente, que las banderas de la alianza prianredista son las del atraso, el regreso al ominoso pasado, al privilegio de unos cuantos, a la desigualdad y la explotación de los trabajadores mexicanos.

RESPONSABILIDAD HISTÓRICA

El próximo domingo, en el ejercicio de un derecho que mucho ha costado y de una obligación que con frecuencia se elude, los mexicanos, y los sinaloenses en particular, deberemos concretar nuestra decisión electoral y, así, estaremos participando en la configuración del futuro nacional.

Se trata de una responsabilidad histórica en la definición de la elección por la gubernatura, alcaldías, diputaciones locales y federales, en la contienda quizás más competida y controvertida de los últimos tiempos. Como sea, lo deseable es que los ciudadanos hagamos un serio ejercicio de reflexión antes de emitir nuestro sufragio.

VOTOS SIN MITOS

Aparte de las razones obvias para ello, es necesario evitar ser arrastrados por los excesos publicitarios y el manejo electorero de promesas y expectativas.

Las calumnias, ataques sin pruebas, anónimos y demás vulgaridades que rebajan el proceso electoral, deben ir a la basura.

Se trata, en suma, de que se emitan los votos sin ser jalonados por los mitos. Votos conscientes de sus alcances, producto del libre albedrío y del convencimiento con base en elementos válidos y confiables.

El llamado a la reflexión, dicho sea no tan de paso, únicamente puede molestar a quien no quiera un electorado pensante.

CON ESOS CRÍTICOS…

“The Economist”, la revista extranjera que recién publicó una portada injerencista en contra del gobierno de nuestro país (sólo en México, pues en la edición inglesa puso otra, dejando clara su intención) es una publicación semanal que tiene su sede en Londres, pertenece a una sociedad editorial controlada por las familias multimillonarias Rothschild y Agnelli, que tienen el 50% de la empresa y la otra mitad está en manos de capitalistas privados que son sus socios.

Es un medio que apoya el neoliberalismo y critica ferozmente a todo gobierno que no empata con los intereses del capital transnacional, a los que defiende abiertamente y está en contra de las soberanías nacionales.

UNA PRENSA VENDIDA, SIN DUDA

Así las cosas, carece de toda confiabilidad la crítica vulgar que han hecho al presidente mexicano. Es lo que acostumbran, quieren seguir tratando a nuestros países como las colonias explotadas por el imperio británico.

Ese, sencillamente, no es periodismo, sino vendimia vulgar de propaganda.

Y en Inglaterra, en sus ciudades más importantes, como Londres, el deterioro social y la miseria aumentan cada día. De eso no se ocupa “The Economist”.

EN EL TINTERO

-El engendro de la alianza prianredista perderá la elección en Sinaloa, sin asomo de duda. Después, ya verán que inventan.

-A unos días del cierre de campañas, arrecia la guerra sucia y algunos políticos piensan que se puede difamar y calumniar sin prueba alguna. Pronto se verá que se equivocan. ([email protected]).

Fuente: Internet

Fotografía de perfil de Jorge Guillermo Cano

Jorge Guillermo Cano

Columnista

Jorge Guillermo Cano

Ver más

Al momento

Suscríbete a nuestro boletín

Para tener la información al momento, suscríbete a nuestro boletín en el tendrás las últimas noticias de Sinaloa, México y el mundo.