Desde 1995, en Tabasco, 530 mil usuarios de la CFE no pagaban el recibo de la luz, de un total de 755 mil usuarios. No pagaban, según esto como resistencia a los comicios de ese año, donde ganó Roberto Madrazo al hoy Presidente. La moneda para pagar la luz en Tabasco era la lealtad a Lopez Obrador y no pasaba nada.
López Obrador, no ganó, demostró lo que pudo, el Presidente Zedillo quiso tumbar al ya Gobernador Madrazo, pero este, según dicen al ir a Los Pinos se desvió a Atlacomulco a ver a su padrino Carlos Hank, quien le dijo que “hiciera su propia resistencia”.
Tabasco no es un Edén y menos en política, lo que siguió es qué: mientras los usuarios de la Luz no pagaban, los empresarios y clase política pedían a los Poderes Estatales la separación de Tabasco del Pacto Federal, los tabasqueños saben que subiendo la apuesta pueden ganar.
Todo esto se acabó cuando Zedillo va a Tabasco y le dice a Madrazo que gobernarán juntos: 5 años después, vino la frase de “Dale un Madrazo al Dedazo”, pero esa es otra historia y los tabasqueños seguían sin pagar la luz.
López Obrador se fue al PRD, fue Jefe de Gobierno de la CDMX lo desaforaron, pero no pisó la cárcel por un predio, se vino la elección del 2006 durísima, Andrés Manuel tomó Reforma vino la resolución del TRIFE y los tabasqueños seguían sin pagar la luz.
Vino el 2012 y el 2018 con sus respectivas campañas y los tabasqueños seguían sin pagar la luz.
Llega el Presidente y no solo les condona la luz, les da tarifa barata.
¿Qué hizo el Presidente? Pagó el favor de seguirlo, eso si, no fue una resistencia civil, al principio tal vez, lo que siguió fue un abuso entre los usuarios y la propia comisión que no supo como sobrellevar el tema.
El condonamiento presidencial a los tabasqueños es redimirse con su pueblo, es una manera de congraciarse.
En el Capitalismo del Presidente López Obrador la lealtad es la moneda más barata pero es la que solamente se puede cambiar ante él, la moneda de la sumisión también es barata pero es la más necesaria, la moneda más cara es la de la presión, solamente pocos la tienen, incluyendo el Presidente, pero quien sepa tenerla podrá avanzar en este librecambismo de la política.
En donde solamente recibe beneficios los que quiere el Presidente, en donde se benefician a los que quiere el Presidente. La moneda de la presión si se sabe usar y en los tiempos precisos puede jugar a favor.
Mientras acá los agricultores siguen en su lucha, por mejores precios, el Presidente los ve como fifís, como que no necesitan apoyo para seguir alimentando al país, ah pero a los tabasqueños los premia condonándoles una deuda que con ese dinero 11 mil millones bien podría financiar al campo sinaloense.
Pero Tabasco no es Sinaloa… aunque muchos ya quieran hablar con “J”… por aquello de parecerse quedando bien con el Presidente.
