Culiacán, Sinaloa, 15 de julio 2024. En reciente artículo, Juan Becerra Acosta (La Jornada: 03/07/24) se refirió a lo que aquí se ha tocado en varias ocasiones: “la internet hace añicos la cohesión social mientras impulsa los mercados globales”.
Incluso en tiempos de crisis (como la reciente pandemia del llevado y traído Covid) “las bolsas continúan cotizando al alza”, la ganancia no merma, se incrementa.
Becerra agrega: “las generaciones jóvenes encontraron, al conectarse por Internet, algo similar a lo que fue el opio durante finales del siglo XIX: un vicio que exalta la individualidad de la persona llevándola a pensar solamente en su beneficio personal inmediato”.
CONTENIDOS BASURA
En efecto, es un hecho que “el precursor de la sociopatía está en los contenidos, principalmente basura, con los que se evade el aquí y el ahora para llevar a las audiencias a una realidad virtual que las enajena”.
No hace mucho me referí a lo que llamé “la gran trampa” y recibí opiniones a favor y en contra. La Internet tiene millones de seguidores en todo el mundo, pero también hay no pocos críticos capaces de ver el fondo del asunto.
Los adelantos tecnológicos, la ciencia aplicada (que no puede con el cáncer, por ejemplo) solo se enfocan en las comodidades para una sociedad obesa, en el ocio, están al servicio del consumo indiscriminado y promueven el egoísmo y las conductas anti sociales, dígase lo que se diga.
PERO NO SE VE NI SE OYE
Conviene recordar lo que hace unos meses dijo, sin eufemismos, el cofundador de Apple, Steve Wozniak: las redes sociales deben ser abandonadas, eliminadas (Facebook y demás yerbas) y bien sabe Wozniak de qué habla pero, dije entonces: “en obvio, nadie le va hacer caso, la trampa internética está bien diseñada para el control social”.
En México, es un hecho inconcuso que los “medios”, casi todos en el país (con algunas contadas excepciones, al igual que en el resto del mundo) no van más allá de propagar la frivolidad, el consumismo irresponsable, la veleidad, el mitote inane y la tontería. Más de la mitad de sus contenidos se inscriben en esa faena.
Pero sigue sin haber la necesaria discusión donde se supone que debiera darse y no se detiene la fiesta de la irresponsabilidad colectiva.
Ello, a pesar de las evidencias que tienen muchísimas familias de los negativos efectos del uso indiscriminado de los costosos aparatos del consumismo.
EL NEGOCIO DE LA ADICCIÓN
La adicción a las llamadas redes sociales es un hecho desde hace tiempo, pero los medios no hacen sino promoverlas a destajo. Negocios son negocios.
Frivolidad, cursilería, liviandad, disfrazada apología de las desviaciones sociales (y del narco, digan lo que digan) constituyen más de la mitad del contenido cotidiano de los medios en México, prácticamente todos.
Es abierta y sin recato la promoción de basura “musical”, “tendencias” de las tales redes, internalización irresponsable de expresiones que promueven la incultura: “causa furor”, “arrasa”, “deja sin aliento”, “hace explotar”, “conquista”, “deslumbra”, “hipnotiza” y más ridiculeces, refiriéndose a los andares de “la farándula”, “celebrities” e “influencers”.
EN EL TINTERO
-23 ex gobernantes de América Latina y España, todos ellos de pésima fama y negativos resultados para la población (entre ellos Fox y Calderón) integrantes de una tal ultra derechista “Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA)” se metieron otra vez en asuntos que solo competen a México. No aprenden.
-Lo del tal “Alito”, es una vergüenza; y más para quienes le apoyan. “El partido (PRI) huele a muerte”, bien lo dijo Francisco Labastida.
-Y carente por completo de capacidad y criterio, la senadora pluri de Alito en Sinaloa pretende corregir la plana a Labastida. Cosas veredes.
-La corrupción del aparato de Justicia en México es una realidad mayúscula, la realidad está a la vista y es inobjetable. La reforma es indispensable, a menos que se sea cómplice.
-El caso del juez Rodrigo de la Peza no es más que un botón de muestra de miles, decenas de miles, de casos de jueces, ministerios y funcionarios en general de ese corrupto aparato “de justicia”.
-Que ya hay una “Red Ciudadana Anticorrupción de Sinaloa”. Vamos a ver.
-¿Que CNN y El Universal son de lo más confiable? Por favor. Eso dice la universidad de Oxford, que no hace malas tintas con sus premios, como muchas otras en Estados Unidos que solo “reconocen” a sus afines.
-Un balazo en la oreja, candidatura y muy probablemente presidencia, por si algo le faltara. Que el atentado es condenable, sin duda, pero es también la cosecha de la violencia política que el Partido Republicano y el propio Trump han instalado.
-Hace bien Marcelo Bielsa al criticar la organización de la llevada y traída “Copa América”, torneo capitalizado por Estados Unidos, que hace el gran negocio desde hace rato con juegos de esto y aquello donde los “latinos” son los que pagan carísimos boletos.
-México es el cuarto país de Latinoamérica con mayores reportes de fraude; la inteligencia artificial (IA) es uno de los recursos que han fortalecido esas prácticas. ([email protected]).
