Hace algunos meses la Revista Proceso le hizo una entrevista al Dr. Felipe Ávila por el motivo de su más reciente libro ÁLVARO OBREGÓN Luz y sombre del caudillo, publicado por la Ed. Siglo XXI.
Para el Dr. Felipe Ávila, Álvaro Obregón fue el único general invicto del país, y junto con el generalísimo José María Morelos y Pavón, son los más importantes jefes militares de la historia de México.
Es el verdadero fundador del Estado moderno, impulsor de instituciones que aún existen como la Secretaría de Educación Pública, pero los mexicanos no se identifican con él como con Zapata y Villa.
Con el paso de los años, Obregón se fue volviendo “muy cruel y sanguinario”, asesino junto con Plutarco Elías Calles de su amigo el general Francisco R. Serrano.
Fue el creador del Estado mexicano moderno, Álvaro Obregón no cuenta con el carisma que ha preservado la memoria de otros caudillos revolucionarios, como Emiliano Zapata y Francisco Villa, quienes son nuestros héroes nacionales.
La historia de los sonorenses es la historia de los triunfadores, escribió Héctor Aguilar Camín en La frontera nómada: Sonora y la Revolución mexicana (1977). Los triunfadores de la revolución tienen un nombre: carrancistas; y dentro de ese grupo una facción: la de los revolucionarios de Sonora.
No hay literatura obregonista. Obregón no tiene a un Martín Luis Guzmán que invente sus memorias, y para configurarlo como personaje, el máximo narrador de su época tuvo que mezclar sus rasgos a los de Calles en La sombra del caudillo.
Dice José Emilio Pacheco que: “Obregón tiene la ventaja o inconveniente de ser un primo pobre de los Salido. Es herrero, profesor de primaria, maestro mecánico agrícola; diseña una sembradora de garbanzo y llega a poseer doscientas treinta hectáreas. No ignora sus talentos y habilidades. Su ambición no cabe en Huatabampo ni en Sonora. Habla los idiomas yaqui y mayo. Observa sus métodos guerreros. Es un devorador de revistas, entre ellas Regeneración”.
Valiente y arrojado, Obregón es un oficial que reflexiona y planea antes de lanzarse, escucha opiniones, jamás se equivoca, nunca pierde. Su estrategia es similar a la que emplearon Morelos y Díaz. Deja que el enemigo ataque, trabaja por su desgaste y entonces arroja contra él una segunda fuerza que ha permanecida oculta y al acecho.
Pasa sin transición del anonimato a la fama creciente, sólo opacado por las hazañas de Villa. En el Fuerte, Sinaloa, don Venustiano Carranza da Obregón el mando del Ejército del Noroeste que debe abrir el camino de la capital y entrar en ella antes que la División del Norte.
Obregón se convierte en el “Rayo de la Guerra” que se apodera de Culiacán y Mazatlán. En Mazatlán ordena el primer bombardeo aéreo de la historia: en mayo de 1914, meses antes de la Primera Guerra Mundial, el aviador Gustavo Salinas ataca un barco huertista.
El volumen de la biografía se divide en 12 capítulos: “Los primeros años”, “Obregón y el maderismo”, “La victoria sobre Huerta”, “La Ciudad de México y la Soberana Convención”, “La guerra civil”, “El inicio de la reconstitución del Estado”, “1919, paréntesis hogareño y campaña presidencial”, “El parricidio”, “El gobierno interino y el triunfo electoral”, “El caudillo en el poder”, “Caudillo agricultor y político” y “El que a hierro mata, a hierro muere”.
Algunos de ellos abordan subtemas como infancia y juventud, la junta carrancista, la Convención de Aguascalientes, el zapatismo, el nuevo pacto social, las fiestas del Centenario, los problemas con la Iglesia católica, la rebelión delahuertista, el petróleo, la guerra cristera y la reelección.
Para los amantes de la lectura y de la Historia, la Comisión de Cultura y Artes, que preside la Dip. Sthefany Rea Reátiga ha organizado la presentación del libro sobre Álvaro Obregón del Dr. Felipe Ávila, para este martes 19 de noviembre, a las 16:00 hrs., en el Congreso del Estado de Sinaloa. Escuchemos al Dr. Felipe Ávila.