Las economías viven hoy en día momentos cruciales. De la mano de gobiernos, empresas y organismos internacionales, enfrentan desafíos importantes con un grave impacto ambiental.
En esta ocasión se busca crear conciencia sobre la importancia de la aplicación, uso y difusión de las llamadas economías verdes, que pretenden ser la base para la transición hacia un sistema más responsable y comprometido con el medio ambiente.
Sin embargo, hay que reconocer que este proceso sigue siendo muy lento. La encuesta sobre el trabajo en el mundo 2023 señala que la transición hacia una economía verde genera, en el corto y mediano plazo, impactos negativos en el entorno laboral.
Específicamente, se habla del impacto que puede causar en los próximos diez años, donde los mercados pueden verse afectados, aun y cuando se generen nuevas oportunidades de trabajo.
La información se refiere específicamente a las inversiones que se están aplicando junto con los criterios ESG (de los que hablamos en columna anterior); que son las normas necesarias para contribuir a la prevención y cuidado del medio ambiente, con el objeto de favorecer el crecimiento del empleo.
El impacto en la creación de empleos se presenta en el área de energía, infraestructura y materiales y se espera que un diez por ciento de las empresas estén en condiciones de crear más empleos.
Por ejemplo, en África es donde se tienen altas expectativas de crecimiento del empleo con un 64 por ciento, Asia Central arroja un 50 por ciento con inversiones en transición verde y Europa con un 53 por ciento.
Como ejemplos de programas con estas inversiones para atender el cuidado del medio ambiente están: La neutralidad del carbono en China, el Plan de inversiones del pacto verde europeo y en Estados Unidos se ha logrado la reducción de la inflación.
El monto total invertido a nivel mundial en estímulos a la ecología es de 1.8 billones de dólares, aproximadamente.
Es de reconocer el esfuerzo que hacen las empresas por cuidar el medio ambiente y trabajar en la transición verde, ya sea en forma individual o con iniciativas conjuntas. Las inversiones en energías renovables tienden a aumentar la generación de empleo en el corto plazo comparado con la inversión en combustibles fósiles, pero aún no es suficiente.
Es importante seguir investigando y socializando estos temas. Los empleos verdes deben ser una prioridad para los gobiernos, empresas, academia, organismos internacionales y sociales.
Tal como se explica en el Informe del trabajo 2023, la transición hacia empresas verdes puede crear cerca de 30 millones de empleos en sectores limpios. Como en China, que en los próximos 6 años espera generar 88 millones de nuevas plazas para sus trabajadores.
Fuente: https://www3.weforum.org/docs/WEF_Future_of_Jobs_2023.pdf
