México.- El presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados, Alfonso Ramírez Cuéllar, puso de relieve que el impuesto a la tenencia vehicular no es un impuesto nuevo, pero se ha pervertido su cobro por lo que debe replantearse el mismo.
A través de un comunicado, el legislador dijo que el impuesto a la tenencia vehicular es un gravamen que existe desde 1961, cuyo cobró era de carácter federal y 100% participable, es decir, que los Estados podían utilizarlo para su gasto público.
“Fue en 2008 que la Ley sobre Tenencia o Uso de Vehículos fue abrogada, para dar paso a un periodo de transición hasta 2011, durante la cual las Entidades Federativas de manera unilateral, pudieron establecer impuestos locales sobre dicho concepto”, recordó.
Abundó que, sin embargo, tal medida origino “una complicidad perversa en los gobiernos locales, pues lejos de hacer eficiente la recaudación de éste gravamen para fortalecer sus haciendas públicas, ponderan el hecho de ganar simpatías sociales al descuidar su cobro”.
Indicó que algunos estados otorgan subsidios en función del valor del automóvil, y también si se está al corriente de otros compromisos fiscales, así como que en la mayor parte de las entidades (como la Ciudad de México) existe otro cobro asociado al automóvil, que es el refrendo por el derecho de uso de placas.
“El problema con las diferenciaciones estatales en el cobro de este impuesto, radica principalmente en la posibilidad que brinda a los contribuyentes de evadir sus obligaciones fiscales, debido a que registran sus vehículos en entidades que no cobran la tenencia a pesar de que transitan por entidades en las que si lo hacen, lo que trae consigo repercusiones negativas como lo es que ante la escasa recaudación de éste recurso se imposibilite el mantenimiento constante de la infraestructura carretera además del deterioro ambiental que genera porque está comprobado, que el cobro de este gravamen es un desincentivo para reducir el uso del automóvil.
Agregó que este sistema unilateral de cobranza impacta de forma negativa a las haciendas y permite a los estados mantener un esquema de competencia desleal para cobrar menos con el fin de obtener ventajas electorales, lo que pervierte y desvirtúa la razón fundamental por la que el Estado debe cobrar impuestos, “que es la de destinar recursos suficientes para cubrir las necesidades de nuestra sociedad”.
Por ello dijo que la propuesta de federalizarlo, va en el sentido de homogeneizar las bases de la tributación así como de terminar con la dispersión, la anarquía y la falta de compromiso de los Estados para ejercer sus facultades tributarias en beneficio de las finanzas públicas y de la inversión en materia educativa, de salud, de infraestructura, de empleo, entre otras cosas.
“La propuesta del Subsecretario de Hacienda va en el sentido de federalizar éste impuesto, ya representa una oportunidad para fortalecer las finanzas Estatales y Municipales, cabe señalar que previó a la derogación del Impuesto sobre la Tenencia Vehicular, la Ley de Coordinación Fiscal establecía que las entidades federativas debían destinar a sus municipios, al menos el 20% de los recursos que les transfería la federación por la recaudación de dicho Impuesto, es por ello que en 2008 se les transfirieron al menos 4,220 millones de pesos” expresó.
Advirtió “entre las ventajas del cobro de este impuesto destacan su progresividad, es decir, pagan más los que más tienen y se reducen los efectos negativos asociados a la congestión vehicular, el tránsito y la emisión de contaminantes ambientales, por otro lado, también es de fácil cobro y supervisión, lo que disminuye la tasa de evasión y contribuye así de una mayor equidad en el cobro del impuesto”.
Finalmente enfatizó que no se pretende aumentar la tasa impositiva de los impuestos, sino de hacer más eficiente la recaudación fiscal con los gravámenes existentes, aumentando la base gravable y combatiendo la evasión y la elusión fiscal, que tanto han lastimado las finanzas públicas en los tres órdenes de gobierno.