Harán puente aéreo para 30 mil turistas atrapados por ‘Odile’

México, DF.- Aviones de la Fuerza Áerea y
de la Marina mexicanas harán un puente aéreo para evacuar a unos 30 mil
turistas que quedaron varados en Los Cabos por el huracán Odile, que
causó importantes daños sin dejar víctimas en la península de Baja California.
Odile obligó a unas 11 mil personas a
trasladarse a albergues y a los turistas a refugiarse en salas de conferencias
de los hoteles mientras el viento rompía cristales, inundaba calles, arrastraba
autos y tiraba árboles y postes de luz.
El huracán, considerado el más fuerte de los
últimos años en Baja California, entró la noche del domingo desde el océano
Pacífico con vientos de más de 200 kilómetros por hora que corresponden a la
categoría tres de una escala máxima de cinco.
El lunes perdió fuerza pero sigue siendo un
huracán con vientos de 130 kilómetros por hora, de categoría uno, que todavía
representa riesgos y está unos 70 kilómetros al sureste de la localidad de
Loreto.
“La población más afectada en este momento
es la zona de Los Cabos”, dijo el coordinador nacional de Protección
Civil, Luis Felipe Puente.
Según indicó, hubo “daños importantes”
en viviendas y comercios y casi todos los postes de luz se cayeron. Sin
embargo, “hasta el momento, en carácter preliminar, no tenemos una sola
víctima que haya perdido la vida”.
Puente dijo que el aeropuerto de San José del
Cabo sufrió daños que impiden su operación comercial y se quedó sin luz, por lo
que los traslados de los turistas con el puente aéreo se harán solo durante el
día.
En Los Cabos hay 26 mil visitantes extranjeros y
4 mil mexicanos resguardados en albergues u hoteles. Los aviones militares los
trasladarán desde San José del Cabo hasta Tijuana o Mazatlán.
Algunos hospitales sufrieron afectaciones, pero
siguen prestando servicio. Unas 135 personas tuvieron que recibir atención
médica.
Algunas sufrieron cortes con vidrio o lesiones
por caída de material de los techos, además de crisis nerviosas.
Los puertos fueron cerrados a la navegación y las
escuelas suspendieron las clases. En la carretera La Paz-Los Cabos hubo algunos
derrumbes. El servicio de energía eléctrica está suspendido mayormente y hay
problemas de abastecimiento de agua potable por la falta de luz.
Los Cabos es un destino turístico con grandes
hoteles de lujo junto a la playa y campos de golf, muy buscado por turistas
estadunidenses y amantes del surf, además de que hay comunidades de pescadores
y frágiles casas de los lugareños.
La llegada del huracán coincide con los festejos
patrios de la Independencia de México, durante los cuales muchas personas
aprovechan para pasar unos días en la playa.
En Baja California Sur se suspendieron las
celebraciones, que empiezan la noche del 15 de septiembre con la ceremonia del
Grito y culminan con un desfile militar el martes, que es día festivo.
Aviones de transporte que iban a participar en
los desfiles se sumarán al puente aéreo.
Los efectos del huracán, que hacia el miércoles
saldrá a la zona del Golfo de California, se sienten también en estados como
Sinaloa y Sonora.
El año pasado para estas mismas fechas el huracán
Manuel azotó la costa del Pacífico sur de México, en la región de
Acapulco, y dejó más de 150 muertos al combinarse con los efectos del huracán Ingrid,
llegado desde el Golfo de México.
Puente informó que cinco municipios fueron
declarados en emergencia para que puedan tener acceso a fondos especiales de
catástrofe. Se trata de Comondú, La Paz, Loreto, Los Cabos y Mulegé.
El director de la Comisión Nacional del Agua,
David Korenfeld, dijo que la alerta de huracán rige desde Santa Fe hasta Punta
Abreojos en la costa oeste y desde La Paz hasta Santa Rosalía en la costa este
de la península.
En paralelo, en el norte de la península se
registró un sismo leve de 5.1 de magnitud con epicentro en aguas del Golfo de
California, 117 kilómetros al sureste de San Felipe, pero no dejó daños.IN