Estados Unidos. Autoridades locales en Florida, Estados Unidos, señalaron que tras el huracán Idalia varios automóviles eléctricos se prendieron en llamas, después de estar en contacto con agua salada.
Expertos señalaron que las partículas residuales de agua salada quedan en las baterías inundadas y en sus componentes pueden conducir la electricidad, lo que provoca cortocircuitos y posibles incendios.
Por lo anterior, autoridades locales pidieron a los dueños de los autos eléctricos que estuvieran inundados tomar medidas de inmediato, ya que estos incendios podrían darse incluso después de varias semanas de la inundación.
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Autoridades de Florida señalaron que dos vehículos se incendiaron, uno en Palm Harbor, a 22 millas al norte del centro de St. Petersburg, y otro en Pinellas Park, en el centro del condado Pinellas.
El primero tuvo lugar el pasado miércoles 30 de agosto, luego de quedar sumergido bajo el agua, el segundo ocurrió el pasado jueves 31 de agosto, mientras era remolcado por una grúa.
“Si es propietario de un vehículo híbrido o eléctrico que ha entrado en contacto con agua salada, es crucial que saque el vehículo de su garaje sin demora. La exposición al agua salada puede desencadenar la combustión de las baterías de iones de litio”, indicó el departamento de bomberos de Palm Harbor
