Beirut.-No ha sido la destrucción de arsenales que, por error, anunciaron ayer
algunos medios de comunicación en diversas partes del mundo, pero
representa un paso adelante en el proceso de desarme químico emprendido
por el régimen sirio, con el padrinazgo de Moscú y Washington, para
alejar definitivamente el fantasma del ataque militar amagado por EE UU a
fines de agosto.La Organización para la Prohibición de Armas
Químicas (OPAQ) confirmó ayer que todos los centros de producción y
procesamiento de ese tipo de armas declarados por Damasco han sido
inutilizados por las autoridades sirias, que tenían de plazo para
hacerlo hasta hoy, 1 de noviembre.Se trata de un total de 23
sitios, aunque la oposición ha denunciado en varias ocasiones que la
cantidad total de plantas de producción ronda el medio centenar y que el
régimen de Bachar al Asad ha ocultado numerosos datos a la OPAQ.Los
inspectores de la organización, galardonada recientemente con el Nobel
de la Paz, visitaron satisfactoriamente 21 de los 23 lugares y no
pudieron acceder a los dos restantes por encontrarse en zonas demasiado
peligrosas. Aunque, por razones de seguridad, estos lugares no fueron
visitados, Siria aseguró que habían sido abandonados y que las armas
químicas que contenían fueron trasladadas a otros puntos que sí fueron
inspeccionados, precisó la organización.”La OPAQ está satisfecha
por haber verificado y por haber constatado la destrucción de todos los
equipos declarados de producción, mezcla y rellenado de 23
instalaciones”, se lee en un documento hecho público ayer.Queda
ahora lo más complejo, como bien se encargó de recordar la OPAQ: poner
en pie un plan para la eliminación no ya de las fábricas de armamento
sino de las toneladas de armas químicas que se agolpan en los arsenales
sirios. El Consejo Ejecutivo de la organización tendrá que aprobar el
próximo día 15 un plan detallado de destrucción de esos arsenal, que aún
no ha sido presentado por Siria.La principal dificultad estriba
en que el país no dispone de las instalaciones necesarias para proceder a
esa destrucción con garantías de que no se desencadene una grave
contaminación ambiental. El plan debe incluir como horizonte temporal
para consumar la destrucción total el primer semestre de 2014, por lo
que, en principio, la fecha tope para esta segunda fase será el próximo
30 de junio. Se calcula que Siria tiene al menos un millar de toneladas
de armas químicas, por lo que su control, transporte y destrucción total
implica un proceso largo y complejo.En el plano bélico, Israel
atacó por aire el miércoles por la noche dos objetivos militares sirios,
con el objetivo declarado de destruir armamento listo para ser enviado a
los milicianos chiíes libaneses de Hezbolá, según informaron ayer
fuentes militares norteamericanas. Los ataques del miércoles han venido
precedidos, en lo que va de año, por al menos otros cuatro, todos con el
mismo objetivo de evitar el envío de armas a Hezbolá.LM
Siria concluye la inutilización de sus fábricas declaradas de armas químicas
La OPAQ certifica la ejecución del operativo en los 23 sitios notificados por Damasco - Asad debe presentar un plan de destrucción antes del día 15
Fuente: Internet