Grecia. La isla de Santorini, famosa por su belleza y su atractivo turístico, se encuentra en medio de una crisis sísmica. Desde el pasado 26 de enero se ha desatado una serie de temblores que han preocupado tanto a la población local como a las autoridades griegas. En tan solo 10 días, se han registrado más de siete mil 700 sismos, incluyendo uno de magnitud 5.2, el más fuerte en lo que va del fenómeno.
Ante esta situación, el gobierno griego ha declarado un estado de emergencia que se extenderá hasta el 3 de marzo. Aunque la intensidad de los temblores parece haber disminuido, los científicos no se atreven a declarar el fin de la actividad sísmica.
La isla, que alberga a unas 15 mil personas y recibe alrededor de 3.4 millones de turistas al año, enfrenta una grave crisis. Como medida preventiva, más de 11 mil residentes y trabajadores temporales han sido evacuados desde el pasado domingo.
Te puede interesar leer: Empresa eléctrica reconoce posible responsabilidad en incendio forestal en Los Ángeles
El gobierno está trabajando para garantizar la seguridad de la población y mejorar la comunicación con los ciudadanos, anunciando el lanzamiento de una nueva plataforma digital para alertar sobre posibles nuevos sismos.
Esta actividad sísmica es la más fuerte registrada en la región desde 1964, lo que aumenta la preocupación entre expertos y autoridades. El director de la Autoridad Griega de Planificación y Protección contra Sismos, Efthymios Lekkas, advirtió que la actividad sísmica podría continuar durante días, e incluso semanas.
A pesar de que los temblores parecen estar disminuyendo, la comunidad científica sigue monitoreando de cerca la situación, temiendo que los movimientos sísmicos puedan persistir.