Italia.- El Papa Francisco, quien desde hace algunas semanas estuvo causando preocupación tras ser diagnosticado con una bronquitis que lo obligó a cancelar parte de su agenda, ha reaparecido para un evento público este viernes 8 de diciembre.
El sumo pontífice estuvo presente en la festividad católica de la Inmaculada Concepción, hasta donde arribó en un auto negro y bendijo a una multitud antes de sentarse frente a la estatua, procediendo a cumplir con la tradición de orar ante la estatua de la Virgen en la Escalinata de la plaza de España.
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En su oración el líder religioso oró a María por “toda la gente oprimida por la injusticia y la pobreza, en medio de la guerra”, la cual actualmente afecta a diversas regiones del mundo.
Antes de ir a la Escalinata, Francisco visitó la basílica de Santa María Mayor para rezar ante una de sus imágenes preferidas de María, aunque entró a la basílica en silla de ruedas. Previamente, el mandatario impartió la bendición a los fieles desde una ventana abierta sobre la Plaza de San Pedro, en su primera aparición pública después de su enfermedad.
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El Papa Francisco, quien cumplirá 87 años el 17 de diciembre, se enfermó de gripe el 25 de noviembre y debió cancelar el viaje a Dubái. Posteriormente, reveló que le habían diagnosticado bronquitis aguda, lo que le dificultaba la respiración y que lo llevó a permanecer en reposo por varias semanas.
Esta fue la segunda vez este año que el líder religioso sufrió un ataque de bronquitis, pues en abril pasado fue hospitalizado durante tres días para recibir antibióticos por vía intravenosa.
