Italia. Milán adoptará una estricta medida para mejorar la calidad del aire y proteger la salud pública a partir del 1 de enero de 2025: se prohibirá fumar en todos los espacios públicos, incluidas las calles, con excepción de áreas específicas donde se pueda mantener una distancia mínima de diez metros con otras personas. Esta medida es parte del Plan Aire-Clima aprobado en 2020, cuyo objetivo es reducir a la mitad las emisiones de dióxido de carbono (CO2) para el año 2050.
La normativa amplía las restricciones previamente impuestas en lugares como parques, áreas de juegos infantiles, paradas de transporte público, cementerios, instalaciones deportivas y zonas para perros. De esta forma, la nueva ley extenderá la prohibición a todas las zonas de uso público, incluyendo también las vías públicas.
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Las autoridades de Milán señalan que esta ley busca garantizar un entorno más saludable y limpio para los ciudadanos, además de contribuir a la lucha contra la contaminación, un problema que afecta a muchas grandes ciudades europeas. Los infractores que no cumplan con la normativa podrían enfrentar multas de entre 40 y 240 euros.
Esta iniciativa no solo se alinea con los esfuerzos de la ciudad para reducir la contaminación, sino que también posiciona a Milán junto a otras urbes europeas que han implementado regulaciones similares para reducir el impacto ambiental del tabaquismo y proteger el bienestar de sus habitantes.