Irán. El Gobierno iraní informó este fin de semana sobre la ejecución de dos hombres acusados de haber matado a un paramilitar en noviembre durante las manifestaciones tras la muerte de Mahsa Amini.
La mujer, de 22 años de edad, había sido detenida por la policía de la moral por no llevar colocado adecuadamente el velo y murió bajo custodia policial, lo que provocó numerosas protestas a lo largo de todo el país.
Los hombres que fueron condenados a la horca se identificaron como Mohammad Mahdi Karami y Seyyed Mohammad Hosseini, el hecho provocó conmoción en la comunidad internacional.
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Mencionar que los ahora fallecidos estaban acusados de haber matado a un miembro de la milicia paramilitar Basij, ligada a los Guardianes de la Revolución, el 3 de noviembre en Karaj, una ciudad al oeste de Teherán.
La familia de uno de ellos, indicó que fue torturado en la cárcel y no se le concedió acceso a un abogado. Según medios locales, el tribunal de primera instancia los condenó a muerte el 4 de diciembre. El veredicto fue confirmado el 3 de enero por la Corte Suprema de Irán, un proceso calificado por “expeditivo” por parte de las Organizaciones No Gubernamentales defensoras de los derechos humanos.
