Johannesburgo.- El expresidente
sudafricano y héroe de la lucha contra el apartheid, Nelson Mandela, de
94 años, sigue respondiendo al tratamiento dos semanas después de ser
trasladado al hospital.
El Premio Nobel de la Paz, atendido por una infección pulmonar y
cálculos biliares desde su ingreso el 8 de diciembre, recibió la visita
del presidente de Suráfrica, Jacob Zuma, según dijo en un comunicado el
portavoz de Presidencia Mac Maharaj, reseñó Reuters.
“Madiba lleva en el hospital desde el 8 de diciembre y sigue
respondiendo al tratamiento”, dijo Maharaj, refiriéndose a Mandela por
su nombre de clan.
“El presidente Zuma le trasladó el afecto y apoyo de todos los sudafricanos, jóvenes y viejos, y el mundo entero”, añadió.
El primer presidente negro del país fue hospitalizado en Pretoria este
mes tras ser trasladado desde su localidad natal, Qunu, en una zona
remota de la provincia de Eastern Cape.
Parece probable que Mandela, admirado en casa y en el extranjero como
icono global contra la injusticia por su lucha contra el régimen de la
minoría blanca en Sudáfrica, pase la Navidad en el hospital.
El jueves, tras su reelección como líder del gobernante Congreso
Nacional Africano (ANC, en sus siglas en inglés), Zuma dijo que Mandela
había “mejorado de forma constante”.
Zuma dijo entonces que el ex presidente está recibiendo “la mejor
atención posible”, pero recordó que Mandela tiene “una edad en la que
los retos médicos requieren una atención extraordinaria”.
El presidente elogió al histórico líder como “luchador sin parangón”.
En una entrevista emitida el sábado pero grabada un día antes, el recién
elegido vicepresidente del ANC Cyril Ramaphosa dijo creer que Mandela
estaba “recuperándose”.
Mandela pasó 27 años en prisiones del apartheid, incluyendo 18 años en
la isla Robben, frente a Ciudad del Cabo. Fue liberado en 1990 y
aprovechó su prestigio para mediar en la reconciliación entre negros y
blancos como base de la “Nación Arcoíris” posterior al apartheid.
En 1999 dejó el cargo tras una legislatura en la presidencia y en la
última década ha estado en gran parte lejos de la luz pública.
Mandela estuvo un tiempo en un hospital de Johannesburgo el año pasado
por un problema respiratorio y de nuevo en febrero de este año con
dolores abdominales. En esa ocasión se le dio de alta al día siguiente
cuando las pruebas mostraron que no se trataba de nada serio.
Desde entonces ha pasado la mayor parte de su tiempo en Qunu.
Su frágil salud le impide hacer apariciones públicas en Sudáfrica,
aunque ha seguido recibiendo visitantes ilustres de dentro y fuera del
país, como el ex presidente de Estados Unidos Bill Clinton el pasado
julio. NE
