Brasil.- Este jueves 12 de diciembre el presidente Luiz Inácio Lula da Silva fue sometido a una segunda cirugía en el Hospital Sírio-Libanês de São Paulo, la cual tuvo como propósito evitar nuevas hemorragias en la zona posterior de la cabeza donde semanas atrás sufrió un fuerte golpe tras una caída.
Según lo expuesto por el equipo médico del mandatario, la operación fue “relativamente sencilla” y concluyó con éxito, tanto así que Lula da Silva se encuentra “superestable” y en espera de ser dado de alta en los próximos días. Roberto Kalil Filho, médico personal del presidente de Brasil, comentó al respecto:
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El presidente está despierto en la UCI, ya está comiendo, está superestable (…) Dependiendo de la evolución del presidente, debería recibir el alta a principios de semana (…) Tras el alta hospitalaria, el presidente podrá ir a Brasilia el lunes o el martes.
El especialista agregó que Lila da Silva, de 79 años de edad, podrá retomar su agenda de trabajo en breve y retornar de manera gradual a su rutina diaria y sus actividades normales.
La operación de este jueves, calificada como mínimamente invasiva, se ha realizado después de que el pasado lunes el presidente fuera hospitalizado de emergencia y sometido a una cirugía tras sufrir una hemorragia intracraneal, la cual se dice podría haber sido derivada del accidente que sufrió en octubre pasado, cuando resbaló en la bañera del baño de la residencia oficial.
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Finalmente, con Lula en el hospital, es el vicepresidente Geraldo Alckmin es quien debe encargarse de dirigir los compromisos previstos en la agenda del presidente brasileño, esto de acuerdo con lo que dicta la Constitución.