Rusia.-Desde el viernes 23 de septiembre iniciaron los referendos de anexión rusa en cuatro regiones de Ucrania, las cuales están siendo controladas total o parcialmente por Moscú. Este ejercicio de participación democrática se extenderá hasta el próximo 27 de septiembre y, según el ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov, el Kremlin respetará y acatará sus resultados.
Las votaciones que se desarrollan en las regiones de Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia, marcan una escalada muy importante en el conflicto desatado desde el pasado 24 de febrero por el presidente Vladimir Putin. Sin embargo, estas consultas han sido tachadas como “falsas” por Ucrania y occidente, pues los líderes del G7 han prometido “no reconocerlas nunca”, independiente de sus resultados.
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Los líderes del G7, integrado por países como Estados Unidos, Alemania, Francia, Reino Unido, Canadá y Japón, declararon: “Nunca reconoceremos esa supuesta anexión si llega a producirse”. Pero a pesar de esto, son muchas las personas que están acudiendo a las urnas para participar del referendo.
Por otro lado, durante su participación en la Asamblea General de la ONU, Lavrov fue cuestionado de si un resultado favorable implicaría la anexión inmediata de las regiones separatistas, ante lo que el ministro se limitó a responder:
Rusia respetará la expresión del pueblo ucraniano.
Estos referendos añaden tensión a una semana marcada por la movilización de 300 mil reservistas anunciada por el presidente ruso, Vladimir Putin, que también amenazó con emplear su arsenal nuclear para proteger su territorio. Dicho anuncio ha desatado una amplia movilización de hombres rusos hacia otros países, pues temen convertirse en objetos de guerra.
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Además de esto, y en lo que respecta a la ONU, la comisión de investigación sobre Ucrania aseguró, tras visitar 27 localidades e interrogar a más de 150 víctimas y testigos, que “se han cometido crímenes de guerra” en el país.