?Asunción.- El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, retomó hoy sus tareas
oficiales tras recuperarse de una trombosis vascular derivada de su
tratamiento oncológico, lo que el pasado fin de semana obligó a su
hospitalización en la ciudad brasileña de Sao Paulo.
Apenas regresó a Asunción, la tarde del miércoles, Lugo, de 59 años,
merendó con sus ministros y hoy bien temprano, a las 05:30 hora local se
trasladó al Palacio de López (sede del Gobierno), donde recibió a sus
principales colaboradores.
El ministro de Obras Públicas, Efraín Alegre, dijo que habló con Lugo
acerca de las gestiones con las autoridades de Buenos Aires sobre la
apertura de un canal en la provincia argentina de Formosa para desviar
al vecino país las aguas del fronterizo río Pilcomayo.
“El presidente tiene interés de visitar (el lugar), vamos a poner una
fecha, vamos a estar en la embocadura para apreciar la situación del
Pilcomayo”, afirmó Alegre.
A mediados de septiembre pasado, el Gobierno paraguayo denunció la
apertura unilateral del citado canal, aguas arriba de unas tomas hechas
por ambos países hace décadas para asegurar el uso compartido de ese
río, que nace en las estribaciones andinas de Bolivia.
Lugo también recibió a su jefe de Gabinete, Miguel López Perito, quien
reiteró a los periodistas que “el presidente está bien, está trabajando
normalmente y lo seguirá haciendo”.
“Acá no hay ningún interés más allá de decir la verdad, de que se sepa
con toda transparencia(…), de su capacidad de gobernar, y creo que eso
está sobre la mesa en este momento, a la luz pública, a los ojos de
toda la ciudadanía”, aseveró el funcionario.
López Perito desechó de nuevo “las opiniones políticas que contradicen
abiertamente” a los médicos tratantes, que aseguran que el jefe de
Estado está capacitado para gobernar hasta completar su mandato de cinco
años, en agosto de 2013.
“Si no hay motivo real, no abandonará el cargo. Ahí no hay gato
encerrado como están tratando de instalar algunos medios, algunas
personas de que el entorno presidencial quiere sostenerlo”, enfatizó el
jefe de Gabinete.
López Perito, principal referente de las bases de izquierda en el
oficialismo, aludió así al vicepresidente del país, Federico Franco, del
Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA, centroderecha), con quien
mantiene diferencias metodológicas.
Franco pertenece a una fracción del PLRA menos favorecida en los cupos
de poder y algunos dirigentes de izquierda consideran que quiere
aprovecharse de una coyuntura como ésta para tratar de forzar una
eventual sucesión presidencial.
Por su parte, la dirección del Partido Colorado, el principal de la
oposición, cuestionó a través de un pronunciamiento emitido el martes
pasado “a los que se aprovechan de la enfermedad del presidente para
buscar ventajas políticas, personales o de grupo”.
Lugo, que padece un cáncer linfático, superó mediante medicación y sin
necesidad de cirugía los trombos que le obstruían la vena cava superior y
que había obligado su traslado de urgencia el sábado pasado de un
hospital asunceno al hospital Sirio-Libanés de Sao Paulo.
En el marco de su tratamiento, ya ha recibido tres de las seis sesiones
de quimioterapia a las que deberá someterse para combatir su enfermedad
desde que ésta fuera confirmada el pasado agosto en el Sirio Libanés.