Estados Unidos.- El Buró Federal de Investigaciones (FBI) ha brindado una nueva actualización sobre el atentado a Donald Trump el pasado mes de julio, revelando que el atacante no tuvo motivación política para disparar en contra del candidato republicano, ya que antes de ello realizó un “esfuerzo sostenido y detallado” para encontrar una reunión importante en la cual llevar a cabo su cometido.
Según el FBI, Thomas Crooks, de 20 años, buscó más de 60 veces información relacionada con Donald Trump y su entonces rival, el presidente demócrata Joe Biden, antes de registrarse para el mitin del candidato republicano en el estado de Pensilvania.
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Kevin Rojek, el principal funcionario del FBI en el oeste de Pensilvania, señaló que el joven tirador aparentemente buscaba uno de estos eventos multitudinarios para realizar el ataque, pero que su objetivo no estuvo claro desde el principio:
Vimos (…) un esfuerzo sostenido y detallado para planear un ataque en algunos eventos, lo que significa que buscó en varios eventos u objetivos.
En este sentido, el funcionario del servicio de seguridad concluye que Crooks se “hipercentró” en el mitin de Trump cuando se anunció a principios de julio “y lo miró como un objetivo de oportunidad”.
El informe del FBI agrega que no se ha encontrado ninguna prueba que indique que Crooks trabajó con otras personas o fue dirigido por una potencia extranjera. Además, su actividad informática ha revelado que estaba interesado en una mezcla de ideologías, pero no mostró definitivamente que estuviera motivado por un punto de vista particular de izquierda o de derecha.
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Finalmente, hay que recordar que el atentado en contra de Donald Trump ocurrió durante un mitin en Butler, Pensilvania, el pasado 13 de julio, cuando Thomas Matthew Crooks baleó al político desde un techo cercano, hiriéndolo brevemente en la oreja antes de ser abatido por elementos del Servicio Secreto.