Estados Unidos. La policía de Nueva York detuvo a 10 judíos ortodoxos luego de que salieran a la luz varios túneles secretos e ilegales dentro de una sinagoga; las autoridades intentaron sellar los accesos cuando los arrestados se manifestaron.
Se informó que el hecho se registró en el 770 de Crown Heights, Brooklyn, donde, a la llegada de los camiones de cemento, un gran grupo de jóvenes intentó impedir a los obreros realizar su trabajo.
Durante la trifulca los judíos intentaron romper las paredes de madera que ocultaban la entrada a los túneles, adentrándose en ellos para evitar que los rellenaran de cemento.
A través de redes sociales se viralizó el momento en que los judíos protestan negándose salir del lugar, por lo que fue necesaria la intervención de las fuerzas del orden.
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De manera extraoficial se informó que durante el mes de diciembre, el rabino descubrió que los jóvenes habían excavado túneles bajo el edificio. Dichos túneles fueron construidos por jóvenes del movimiento Jabad, llamado Bochurim, cuando comenzó la pandemia en 2020. A través de ellos, los judíos podían acceder al templo sin tener que pasar el control de seguridad.
La sede judía emitió un comunicado señalando que la comunidad de Jabad-Lubavitch está dolida por el vandalismo de un grupo de jóvenes agitadores que dañaron la sinagoga.