Pekín.- China considera “un derecho” el envío de dos patrulleras de vigilancia a las aguas territoriales de las disputadas islas Diaoyu, Senkaku para Japón, un polémico enclave que ha suscitado las peores tensiones en años entre ambas potencias.
El portavoz chino del Ministerio de Exteriores, Hong Lei, defendió esta
última decisión tomada por China en base a que “las islas son parte
inseparable de China”.
“Que los buques de vigilancia vayan (al polémico archipiélago) forma parte de sus derechos”, sentenció.
A primera hora de hoy, Japón informó de que dos barcos chinos de
vigilancia entraron en aguas territoriales de los conflictivos islotes,
lo que llevó a Tokio a convocar una reunión extraordinaria de
seguimiento en la Oficina del Primer Ministro nipón para estudiar
contramedidas.
Horas después, Taiwán -que también reclama el control de las islas-
informó de que al menos 75 pesqueros partieron hoy del puerto taiwanés
de Suao, al nordeste, hacia el polémico enclave, con la intención de
reafirmar sus derechos de pesca y la soberanía taiwanesa del
archipiélago.
Frente a ello, el portavoz de Pekín instó a Taiwán -isla que considera
parte del país asiático- a unirse a China “como uno” y “conjuntamente”
defender el interés de la nación china.
Las tensiones entre Japón y China se incrementaron tras el anuncio de
Tokio de la compra de tres de las conflictivas islas en manos de un
propietario nipón.
El movimiento de Tokio reavivó el sentimiento antijaponés en China,
donde se multiplicaron las manifestaciones en todo el país y, en algunos
casos, se tornaron violentas.
Algunas plantas de firmas niponas en el país asiático sufrieron ataques,
por lo que decidieron paralizar su producción temporalmente.
El ambiente de las protestas también motivó que numerosos
establecimientos japoneses, desde restaurantes hasta tiendas de ropa,
cerraran por miedo a incidentes similares.
Según confirmó Hong, la relación comercial entre ambos países ya se ha
visto afectada, si bien el portavoz destacó que China “no quiere” que
esto ocurra.
Por ello, Hong volvió a instar a Japón a “volver al camino de la negociación y el diálogo”.
Como parte de su apuesta por el diálogo, China aceptó la visita del
viceministro de Exteriores de Japón, Chikao Kawai, que llega hoy a Pekín
con el objetivo de aliviar la tensión bilateral causada por la disputa
territorial.
Está previsto que Kawai se reúna mañana con un alto cargo del Ministerio
chino de Exteriores para abordar el deterioro de las relaciones entre
ambos países, antes de regresar ese mismo día a Tokio.
Pekín también anunció ayer el envío hoy de una delegación diplomática a
Japón encabezada por el ex director general para asuntos asiáticos Yang
Yanyi para intentar mejorar la situación.
El pequeño archipiélago de la discordia está a unos 250 kilómetros de la
costa de China continental y 200 al oeste del archipiélago japonés de
Okinawa, y se cree que sus aguas podrían contar con grandes recursos
marinos y energéticos.IN