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México.- Este 27 de marzo se celebra oficialmente el Día Mundial del Teatro, una fecha para conmemorar la importancia y el sentido de las artes escénicas, las cuales se han hecho visibles desde hace muchas décadas atrás, acompañando a la población con entretenimiento, aprendizaje e incluso actuando en favor de grandes movimientos sociales.
¿Qué es el teatro?
El teatro es una de las actividades culturales y artísticas más antiguas que conoce la humanidad. Es aquella representación que tiene lugar sobre un escenario y consiste en la recreación de una o varias historias de distinta índole mediante actores, discursos, música y escenografía.
Es una herramienta de comunicación masiva, la cual no solo permite educar sino también generar reflexión, empatía y cantidad de sensaciones, siendo una de las experiencias más mágicas que puede vivenciar un ser humano.
¿Cómo nació la celebración del Día Mundial del Teatro?
Fue en 1961 cuando el Instituto Internacional del Teatro de la UNESCO decidió organizar una jornada mundial para celebrar una de las más destacadas artes escénicas: la dramaturgia.
En un contexto de reconstrucción europea, la elección de la fecha se debió a que desde 1954, todos los 27 de marzo de daba inicio a la temporada en el Teatro de las Naciones de París, evento con en el que se pretendía lograr una comunión entre países luego de finalizada la Segunda Guerra Mundial.
Así pues, el objetivo de conmemorar esta fecha es llevar a más personas a conocer lo que es el teatro y las artes escénicas, por lo cual en todos los países del mundo suelen realizarse innumerables obras, pensadas para todo tipo de público y que comúnmente logran cautivar el corazón de los espectadores.
Finalmente, a propósito del Día Mundial del Teatro, recordamos el discurso de Eugenio Ionesco para conmemorar dicha fecha, siendo este escritor, dramaturgo y uno de los máximos representantes del teatro del absurdo, quien expresó para ese entonces:
El Arte, se dice, no tiene fronteras. El teatro no debe tenerlas tampoco, más allá de las divergencias ideológicas, castas, razas, nacionalismos, patrias particulares, debe ser la patria universal, el lugar de encuentro de todos los hombres que comulgan con la misma angustia y las mismas esperanzas que revela la imaginación, no arbitraria, ni realista, sino expresión de nuestra identidad, de nuestra continuidad, de nuestra unidad. ¡Nada de consignas para los creadores! ¡Nada de recibir instrucciones de los gobiernos!
¿Y para ustedes, qué tan gratificante o enriquecedora ha sido la experiencia del teatro?
