Tuluá, Colombia.- Un duro y escalofriante hecho fue denunciado por una familia tras sufrir por la muerte de una recién nacida en el Hospital Tomás Uribe Uribe.
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Esto porque al momento de realizar los trámites para retirar el cuerpo de la bebé fallecida, el centro médico le hizo entrega de una bolsa con una rata muerta en su interior, informa Caracol Noticias de Colombia.
Según indicó el portal Turbaco News, por ahora se desconoce el paradero del cuerpo de la menor, situación que fue denunciada a las autoridades.
El hecho se registró cuando la madre, identificada como Jari Daniela Vélez, fue inducida a parto natural cuando recién cumplía 28 semanas de embarazo, debido a que la lactante había fallecido por complicaciones en su gestación, por lo que era necesario extraerla de su cuerpo.
Sobre lo ocurrido, la pareja de la mujer, Daniel Jaramilo, sostuvo al sitio Valle al Instante 1 que “nos dijeron que la bebé no tenía frecuencia cardiaca, ni latidos en el corazón. Ante ello, le dieron una pasta para madurar el útero y acelerar el procedimiento para que saliera la bebé que ya estaba muerta”.
Tras el proceso clínico, el padre se acercó al hospital para hacer los trámites respectivos para recoger el cuerpo de la menor, pero en ese instante se percató que “nadie sabía que una bebé había fallecido”.
Sin embargo, tras el arribo el personal funerario, el hospital hizo entrega de los restos y Daniel Jaramillo solicitó ver el cadáver antes de que se lo llevaran, y descubrió el lamentable hallazgo: Dentro de una bolsa roja, que se encontraba al interior de una caja, había una rata muerta y no el cuerpo de la menor.
“Cuando desamarramos las bolsas, había una totalmente sellada, ahí había una rata como el tamaño de una zarigüeya y también había unos guantes quirúrgicos”, aseveró el padre y agregó que estaba sellada con todos los datos de la bebé.
La situación conmocionó a la familia y a los habitantes de esta localidad, quienes realizaron una manifestación en las afueras del Hospital Departamental Tomás Uribe Uribe con carteles en los que se lee “exijo la entrega de mi bebita. Viva o muerta” y “el sábado nació Emily Samara y el hospital no la entrega aún”.
Ante la situación, el centro de salud publicó un comunicado y aseguró que se iniciará una investigación interna para esclarecer qué pasó con el cuerpo de la pequeña niña, lamentó lo sucedido y se puso a disposición de cualquier necesidad de la familia.
