El Titanic es probablemente el barco más famoso de la historia, cuya fama se consolidó con la película de 1997 dirigida por James Cameron, sin embargo existe cierto misticismo en torno a este hecho cuyos mitos siguen presentes en la actualidad.
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Una creencia popular que los constructores del Titanic dijeron que nada podía hundirlo, pero la BBC reporta que lo que se dijo en realidad fue que era “prácticamente inhundible” y que sabían que no era el mejor barco, simplemente era el más grande.
Muchos pensaban que el Titanic era un gran paso en cuanto a innovación y diseño, pero se dice que muchos de sus elementos fueron creados usando otros barcos más pequeños como inspiración y simplemente apelando para ser mucho más grande, y esto fue parte de lo que impedía que pudiera realizar las maniobras necesarias para evitar accidentes, como el choque con un iceberg.
Muchos dicen que el iceberg no fue el mayor problema del Titanic, sino el hecho de que sus creadores estaban intentando romper un récord y llegar a su destino antes de lo esperado. Pero los expertos dicen que, de hecho, no todas las calderas estaban encendidas y el barco avanzaba a través de una ruta más larga con el fin de evitar icebergs, y romper un récord habría significado que sus pasajeros llegarían a sus hoteles antes de lo esperado, lo que podría causarles problemas.
Uno de los pasajeros famosos fue J. Bruce Ismay, director de la compañía del Titanic, a quien los medios culparon del desastre y acusaron de pedir a la tripulación que aumentaran la velocidad para romper el récord, además de que se dice que escapó mientras los pasajeros sufrían. En realidad, hay registros de que Ismay ayudó a varias personas a subir a los botes y solo subió a uno cuando vio que no quedaba nadie más a su alrededor. Algunos testigos incluso dijeron que a Ismay se le ordenó subir al salvavidas, y el juez John Charles Bigham dijo: “Si él no hubieras subido, simplemente habría agregado una más, la suya, al número de vidas perdidas”.
Al capitán Smith se le recuerda como un héroe, pero la BBC dice que, de hecho, fue él quien ignoró las advertencias de icebergs y permitió que los botes salvavidas fueran lanzados sin estar completamente llenos, lo que podía haber salvado a otras 500 personas.
Con información de GQ.