Culiacán, Sin.- Cada 1 de agosto se celebra el Día Mundial de la Alegría, el cual sirve para recapacitar sobre la importancia de ver la vida a través de ese sentimiento. Pero, ¿qué es la alegría?… Se describe como un sentimiento de placer producido normalmente por un suceso favorable que suele manifestarse con un buen estado de ánimo, la satisfacción y la tendencia a la risa o la sonrisa.
Dicen los expertos que la alegría tiene múltiples beneficios para la salud pues cuando las personas se sienten alegres generan un neurotransmisor llamado serotonina, que contrarresta el estrés y la ansiedad.
Cuando nos sentimos alegres, casi en automático surge el deseo de compartir esa alegría con otros. No en vano en Culiacán el Stand-up sigue ganando seguidores y cada vez son más quienes comparten su experiencia de vida o punto de vista particular sobre algún tema, pero en vez de hacerlo desde la tragedia, lo hacen de una manera chusca y alegre desde la comedia.
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- En el Comedy Club se presentan estos tres comediantes culichis
Aunque suene a cliché desgastado, dicen que la vida es buena o mala dependiendo la interpretación que tú le des a la misma, razón de sobra para reírse de las situaciones que en algún momento pudieran haber parecido embarazosas, pero que hoy no son más que recuerdos que nutren la alacena de anécdotas. Eso justamente es lo que hacen muchos standuperos.
En la capital sinaloense hay un lugar donde los comediantes más reconocidos les dan vida a sus anécdotas hilarantes: se trata de La Reynosa Bar Casa Comedia, punto en el que convergen Ari, Yuyín y El Chuy Castro.
Para ellos la comedia es una terapia y una forma de vida. ¿Quiénes son? ¡Aquí te contamos su historia!
Desde hace algunos años el joven Diego Valdenebro encontró en los escenarios un lugar para hacer amigos, contar anécdotas y transformarse en su alter ego, el implacable Yuyín.
Le preguntamos a Diego quién es Yuyín y esto fue lo que nos dijo:
“Es el alter ego de Diego Valdenebro que es todo lo contrario, Diego Valdenebro es una persona más seria abajo del escenario, más reservada, más tímida y Yuyín es el que me saca de eso, el que le libera, es más aventurero, yo le doy todo crédito a Yuyín, el que está en el escenario”.
¿Cómo fue que llegaste al mundo de la comedia?
“Yo hacía mucho teatro en la universidad, me iba muy bien en los papeles que interpretaba, eran obras muy chilas, luego me empezaron a dar monólogos individuales, a raíz de eso me vieron distintas personas y me preguntaron que si por qué no hacia Stand-up, me di la oportunidad, fui a un barecito pequeño en Culiacán, lo empecé a hacer, me gustó mucho porque fue generar risas fuera de la escuela, me gustó mucho además cuando vi que ahí pagan”.
¿Cómo desarrollas tus historias?
“Yo me baso mucho en historias que me han pasado a mi porque soy de la teoría de que es mucho mejor reír que llorar, por ejemplo, yo me río mucho de mis tragedias cuando ya pasé por eso, las recuerdo y me dan risa, se puede hacer un show de una ruptura amorosa, de la escuela, del camión, de tu vida en el trabajo, yo me baso para los Stand-up, claro, le pones más cositas, cremita en los tacos y demás”.
Para Ariana Maciel Ochoa Burgueño, mejor conocida como Ari, la alegría no es algo que viene prefabricado, es casi como un regalo que llega con las cosas que te hacen feliz, como subirse en el escenario y ser ella misma.
“Yo considero que una de las cosas muy valiosas que tenemos como seres humanos es la risa, entonces el hecho de poder provocarla en alguien es muy gratificante para uno, cuando estás en el escenario y ves que la gente se ríe es muy bonito, te bajas relajado y contento”.
¿Tienes algún personaje?
“Ari siendo Ari” (Risas).
“Yo lo que he escrito han sido vivencias, lo que he intentado es que por cada rutina quede un mensajito, en mi primera rutina hablé de marcianos que venían a la tierra, el punto fue reflexionar y decir: Güey, ¿qué le estamos haciendo a la tierra?”
Para “El Chuy” Castro contar historias graciosas es casi como un deporte, pero reconoce que su incursión en la comedia fue casi un accidente.
“Me invitan a subirme y me doy cuenta que el venir para acá me desestresa, el decir tonteras en el escenario, el contar tus vivencias y que se rían, me agrada eso, es como una terapia. He tenido muy lindas experiencias y he hecho amigos”.
¿Cómo te visualizas a futuro en el Stand-up?
“Mi idea es hacer reír más, llegar al punto en el que la gente esté llorando de risa y por eso trato de escribir mucho, voy empezando y quiero que llegue ese momento, que la gente diga: quiero ir a ver el show de él porque me hace reír, porque me hace sentir bien”.
Cada uno de los standuperos es consciente del papel que desempeñan, saben que su misión de hacer reír a los demás va más allá. Bien dicen que nada debe tomarse en serio en este mundo pues la verdadera sabiduría consiste en saber reír.
