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El Son-afro-andalú-jarocho inunda el Plaza Condesa

El recinto tuvo un lleno total; música representativa de varios lugares del mundo pone a bailar a cientos de jóvenes

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Ciudad de México.- Tres
agrupaciones musicales de la región del Sotavento veracruzano –Son de
Madera, Los Utrera y Ramón Gutiérrez Septeto anegaron el Plaza Condesa
de cadencias andaluzas y africanas en gamas de auténtico son jarocho: 
cientos de jóvenes aplaudieron y bailaron bajo las proporciones
armónicas de “El cascabel” y las trazas rítmicas de “El celoso y la
presumida”, entre muchos sones más.Un lugar en el que
generalmente se presentan ensambles de rock, pop y jazz, acogió esta vez
el ritual del cosmos jarocho: 180 minutos en el que la poética del
cancionero regional, las pulsaciones melódicas/rítmicas y los desparrame
de los pies en la tarima hicieron de la noche un fandango de pujanza
inusitada.”La repuesta ha sido inesperada. Nunca creímos en
lograr lleno total, y mucho menos que el 90 por ciento de los asistentes
fueran jóvenes. El baile y el zapateo en el centro del salón fue,
sencillamente, inaudito”, comenta Alfredo Rivarola, miembro ejecutivo de
OCESA (Organización de Conciertos, Eventos y Espectáculos en vivo de
México), empresa productora del concierto.Las coordenadas de la
ruta musical Cádiz-La Habana-Nueva Orleans-Veracruz se hicieron patentes
bajo la sonoridad de jaranas, violines, cajones, contrabajo, teclados,
requinto, guitarra leona, mandolina, palmadas, panderos, voces y tarimas
en una suerte de reinvención de las tradiciones con “sones de la
tierra”: identidad musical que define la música popular de Sotavento.Son
de Madera (fundado en 1992) con Ramón Gutiérrez a la cabeza, Los Utrera
(instituido como agrupación en 1992) bajo el aliento de don Esteban
Utrera, y Ramón Gutiérrez Septeto (variante de Son de Madera) fueron los
responsables de una jornada memorable en un viaje de lo tradicional(Los
Utrera) a la fusión (Son de Madera) con paradas y reinvenciones de
sones emblemáticos del sur de Veracruz (Ramón Gutiérrez Septeto).Fandango
–fiesta de blancos, mestizos, negros y mulatos–: manifestación
integral de una cultura en la que no participaban peninsulares, ni
indios.Abrazo de modulaciones ensoñadas: engranaje y junturas
del “mar de los deseos” con Cádiz. Jerga marinera, romances, señales
portuguesas en la instrumentación, África y apuntes de la España
sefardí.Sistema tonal en complicidad sonora con los esquemas
rítmicos africanos. Mutabilidad en los instrumentos complementarios. La
guitarra de son o requinto jarocho desempeña el rol principal.I.Son de Madera. Fusión.Inicio
de la procesión: mandolina, violines, teclados, palmadas, contrabajo,
bailadoras, voces y percusiones. Habaneras, aires de tangos, grietas de
valses. Fusión que ensortija lo tradicional con arreglos armónicos
modernos. Zapateo que hace que las tarimas pronuncien las proporciones
de los compases.Canciones desbordadas de sentimientos. Los
violines fincan los motivos, la percusión se entrecruza, las voces
femeninas endulzan las coplas. Los deseos rondan los recodos de la
noche. Una pareja de muchachos baila en los entresijos de la penumbra.
Son de Madera comienza el festejo con blandura que ancla sus pujas en el
son montuno del afrocaribeño.II.Los Utreras. La pureza de la tradiciónFormato
de jarana, violín, guitarra leona, requinto jarocho, guitarra mosquito,
quijada de burro, bailadoras y voces. Genuino representante de
Sotavento. Melodía que la guitarra de son expone. Guiños a la sonoridad
huasteca. “Cielito Lindo”: pone al publico a zapatear entre las mesas.”El
celosos y la presumida” (“Aunque te mueras de celos / nunca me vas a
olvidar / presumida y muy coqueta / qué bonito es cuando llueve / y moja
la flor del mango…”): regocijo en la sala. “El cascabel” (“Ay rezumba
y suena, / ay rezumba y suena, / rezumba y va rezumbando, / rezumba y
va rezumbando / mi cascabel en la arena…”): y los danzarines lanzan
sus atarrayas y la tarima del tablado estalla en taconeos retozones y el
coro proclama: “me despreció una mujer / y cargo ese sentimiento, / que
los amores y penas /mejor se las lleve el viento”.El plaza
condesa es un jolgorio en el que “El toro Zacamundú” arrebuja las
cadencias: “A la rumba, rumba, / a la rumba iré, / yo nunca he sido
casado / con usté me casaré, / con usté me casaré…”. Y se forma la
batahola: regodeo que hermana a Cádiz con Veracruz. “Vengo aquí casi
todos los fines de semana, primera vez que veo esta fiesta tan
espontánea”, comenta la muchacha vestida azul y sombrero panameño, quien
se contonea con sus amigos en la pequeña área de su mesa.Los
Utrera han teñido la anochecida de soplos ribereños en coquetería
consonante. El son jarocho, letanía que nos concierne a todos. Sotavento
ha plantado sus divisas en las meridionales de la Colonia Condesa.III.Ramón Gutiérrez Septeto. Reivindicación y novedadMandolina,
violín, jarana, contrabajo, percusiones, bailadoras, tarima y voces.
“Camotal” en hermoso reflujo melódico. “El Siquisirí” (“El día que yo me
muera / la tierra lo ha de sentir. / Calandrias y primaveras / de luto
se han de vestir, / y la mujer que me quiera / de tristeza ha de morir”)
en frondas cadenciosas múltiples.”Las olas del mar” (“Soy preso
de este aposento / sólo por quererte amar / y oigo las olas del mar /
que no cesan un momento”) en lamento que el violín subraya. Y “El Pájaro
Cú”, “La Iguana”, “El pájaro carpintero” y “Los chiles verdes” y “El
jarabe loco”…IV.EncoreLas tres
agrupaciones ejecutan “La Bamba”: “Para bailar La Bamba, / para bailar
La Bamba / se necesita, / una poca de gracia, / una poca de gracia y
otra cosita”. La noche está irradiada por los relámpagos de la
conformidad acompasada que llegó de Tlacotalpan, Tlalixcoyan, Tuxtepec,
Cosamaloapan, Totolpec, Paso de San Juan… El Plaza Condesa, dársena en
la que afluentes de saraos conviven en cortejo de gala y bamba
inolvidable.No solo el pop y el rock estridente llenan las salas
de conciertos. El fandango y sus rondas andaluzas y negras también lo
pueden hacer. Los jóvenes están hambrientos de cruzamientos y raigambres
genuinos. Esta experiencia debe repetirse.WM

Fuente: Internet

Fotografía de perfil de Liz Douret

Liz Douret

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