Taxco, México.- El cantautor mexicano Joan Sebastian negó hoy que el
narcotráfico esté detrás de la muerte de su hijo Juan Sebastián Figueroa, quien
fue asesinado a tiros el pasado sábado en México.
El compositor convocó a una rueda de prensa en su rancho en Taxco, en el
estado de Guerrero, para pronunciarse sobre las hipótesis generadas en torno a
la muerte de Juan Sebastián, la cual se atribuyó ayer una célula del cartel de
los Beltrán Leyva en un mensaje público.
Al intérprete se le ha relacionado en con el crimen organizado, afirmaciones
que hoy negó de nuevo.
Juan Sebastián Figueroa, de 32 años, falleció a consecuencia de una
hemorragia interna aguda y una laceración pulmonar producidas por el impacto de
una bala. En 2006, Joan Sebastian perdió a su hijo Trigo Figueroa, que murió
también tiroteado en la ciudad estadounidense de Mission, Texas.
Joan Sebastian manifestó que, según “información de fuentes fidedignas
como amigos y testigos”, el tercero de sus siete hijos fue asesinado por
una persona que discutió con él a la entrada de un bar en la ciudad de
Cuernavaca (centro).
Supuestamente, el acceso al bar no le fue permitido por vestir vaqueros y
Juan Sebastián, que, según su padre, iba con “unas copas de más”, se
enfrascó en una riña con el personal de seguridad, que culminó con el disparo
que le costó la vida al joven.
Joan Sebastian explicó que no ha visto las “narcomantas” (mensajes
colocados en lugares públicos por narcotraficantes) que ayer aseguraron que su
hijo murió a manos del narcotráfico, por culpa de una disputa relacionada con
una mujer.
“Yo no tengo enemigos. No necesito protección. La mejor forma de
ayudarme es encontrando al asesino de mi hijo y no tergiversando los
hechos”, afirmó, en relación a los agentes de seguridad, que, dijo, le
ofreció en privado el fiscal del estado de Guerrero.
“Dios y mis hijos saben que soy un hombre limpio”, aseguró el
cantante, a quien los rumores que lo relacionan a él y a la muerte de su hijo
con el narcotráfico le resultan “irrisorios, además de dolorosos”.
El intérprete de “No es de madera” recordó que la primera
acusación pública que lo relacionó con el tráfico de drogas se produjo cuando
se preparaba para lanzar su carrera política y fue formulada por un
delincuente, apodado “El Jarocho”, que después reconoció que había
sido pagado para ello por “importantes personajes de distintos
partidos”.
“Pagué millones de impuestos en Estados Unidos por todo lo que gané,
pero traje mi dinero a México porque sigo creyendo en mi país”, se
defendió el compositor, propietario de varios ranchos.
Joan Sebastian relató cómo soldados del Ejército acudieron a su propiedad
tras la muerte de Juan Sebastián Figueroa y él deseó que le hubieran registrado
“hasta debajo de la lengua”.
“Encontraron a quinientos hombres armados, pero con martillos, picos,
palas y cinceles. Yo combato el ‘narco’ generando empleo”, sentenció.
Joan Sebastian afirmó que no le teme a la justicia, sino a la injusticia.
“Más allá, existe la justicia divina y no, tampoco le tengo miedo”,
concluyó.
En los últimos años han sido asesinados varios músicos, principalmente del
género de corridos, en presuntos ajustes de cuentas de narcotraficantes, a
quienes les gusta que les sean dedicados “narcocorridos”.
En diciembre pasado, varios intérpretes de corridos fueron detenidos durante
un operativo de infantes de Marina que irrumpieron en una fiesta que celebraban
capos del narcotráfico, entre ellos Arturo Beltrán Leyva y Edgar Valdés, alias
“La Barbie”.
Cantante mexicano niega que el narcotráfico esté ligado a muerte de su hijo
Al intérprete se le ha relacionado en con el crimen organizado, afirmaciones que hoy negó de nuevo
Fuente: Internet