Mazatlán, Sin.- Todo fue por obligación, pero más allá de sentirse comprometido, Marco Salazar asegura que era el único “loco” en su equipo que no le tenía miedo a la pelota y encaraba a los delanteros.
El joven mazatleco comenzó a hacerse a una posición tan criticada en el futbol y que se lleva los reflectores en cada uno de los partidos, ya sea por figurar como héroe o villano, pero destaca que su hambre por ser alguien en el futbol profesional lo mantiene firme con el club Cimarrones de Sonora, en Liga de Expansión.
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“Yo jugaba de delantero en los equipos de mi papá, me ponían de portero, no me gustaba hacerlo, pero le fui agarrando poco a poco de cariño a la posición, era el único loco que no le tenía miedo a la pelota, les tapaba a ellos cuando íbamos a patear, después me invitaron a porterear en otros lados”, expresó.
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La particularidad de un portero sinaloenses es la personalidad y la altura, factores que cautivan a los visores de los clubes profesionales en cualquier parte del país. Salazar es uno de tantos arqueros de la entidad que militan en varias organizaciones deportivas, teniendo como referentes a Rodolfo Cota y Luis Cárdenas, ambos arqueros de Primera División.
“Tenemos lo que un equipo busca: la altura, que sepas jugar un poco con los pies y la personalidad que muchos jugadores si la tienen”, dijo.
Marco Salazar, jugador actual de Cimarrones de Sonora
En su paso por clubes como América, Celaya, Toluca y ahora con el conjunto hermosillense, Salazar reconoce el peso y la pasión de cada uno de los equipos, del papel que juegan en la baraja nacional. Aplaude a la afición sonorense por su buen comportamiento y el incondicional apoyo en cada juego.
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“Sí cambia mucho, el peso de un equipo a otro. Más allá para el centro del país (América, Toluca) la gente es muy apasionada y se vive de otra manera que, en Cimarrones, acá es más familiar”, comentó.
Marco Salazar, jugador actual de Cimarrones de Sonora
Salazar reportará a Cimarrones el próximo 12 de junio para iniciar su pretemporada y buscar mayores oportunidades en el arco. Tiene 22 años y acaba de renovar contrato por dos años, algo que le genera bastante motivación para seguir desarrollándose en este ámbito.
