?Milán, Italia.-
El Inter de Milán del técnico español Rafa Benítez precisa de una
victoria el miércoles en Liga de Campeones de Europa, Grupo A, ante el
Werder Bremen, que llega con notables ausencias, si no quiere
complicarse aún más la vida en esta primera fase después del empate
contra el Twente en la primera jornada.
La victoria, además, serviría para acallar el malhumor que empieza a
rodear al ambiente interista tras haber perdido tanto la Supercopa
Europea (ante Atlético de Madrid) y el último encuentro de liga contra
el Roma.
A pesar de que el Inter está primero en el campeonato nacional, igualado
con el Lazio, la derrota del pasado sábado con el Roma en el último
minuto sigue quemando. Un ejemplo del nerviosismo que se respira en el
club se vio durante el encuentro con el conjunto romanista, donde el
rumano Christian Chivu llegó a dirigirse a gritos al técnico español.
El choque contra los alemanes se antoja, pues, como un partido clave
para el Inter y para Benítez. El técnico tendrá que afrontar numerosos
problemas en la formación, como la posible ausencia del delantero
argentino Diego Milito en el once inicial.
El lance contra los romanos ha dejado dos jugadores interistas tocados.
Además de “El Príncipe” Milito, que sufre un ligero estiramiento en el
cuádriceps de la pierna derecha, también sufre problemas musculares el
macedonio Goran Pandev.
Milito se entrenó hoy con el resto de sus compañeros, mientras que
Pandev trabajó a parte, pero ambos fueron convocados para el encuentro
contra los alemanes.
Benítez, con miras al partido ante el Juventus Turín del próximo fin de
semana, podría reservar al argentino Walter Samuel, que también saltó el
partido en el Olímpico de Roma, en beneficio del colombiano Iván
Córdoba.
Es baja el capitán Javier Zanetti, aún con molestias físicas, al igual que con el brasileño Thiago Motta.
El Werder Bremen, tras el empate en la primera jornada continental,
llega al partido contra el Inter con una serie de bajas que reducen aún
más las posibilidades del club alemán, en un partido en el que el rival
ya salía como claro favorito.
“El punto de partido es malo”, admitió sin tapujos antes de partir hacia
Milán, el director deportivo del Bremen, Klaus Allofs refiriéndose a
las bajas de jugadores claves como el delantero peruano Claudio Pizarro,
el centrocampista Torsten Frings, el central brasileño Naldo y el
lateral Clemens Fritz.
El entrenador, Thomas Schaaf, admitió, por su parte, el favoritismo del
Inter, vigente campeón europeo. El defensa Per Mertesacker, por su
parte, señaló que el Inter es mejor “casi en cada una de las
posiciones”.
Un rayo de optimismo sale de la victoria del Bremen el sábado ante el
Hamburgo (3-2) en una nueva edición del derby del norte de Alemania, que
le permitió al equipo salir de un comienzo de crisis suscitado por el
peor comienzo de temporada de la historia de la era Schaaf.
Lo que es claro para el cuerpo técnico y los jugadores del Bremen es
que, pese al teórico favoritismo del Inter, el equipo no va a salir a
defenderse sino que procurará ser fiel a la filosofía ofensiva que lo ha
caracterizado en los últimos años.
“No vamos a salir a meternos atrás. Eso es algo que no sabemos hacer”, dijo Schaaf.