Sinaloa. Los años han pasado, pero millones de mexicanos siguen recordando aquel 23 de agosto del 2008 como el día que la atleta sinaloense, María del Rosario Espinoza, puso su nombre en letras de oro en la historia del deporte mexicano, al conseguir el máximo gallardete de la disciplina en suelo asiático.
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El camino para la oriunda de La Brecha, Guasave, no fue sencillo, puesto que en la etapa de semifinales se midió a la británica Sarah Stevenson, quien llegaba como una de las favoritas al certamen, sin embargo, la guasavense logró salir avante dentro del tatami, y así selló su boleto por el oro ante Nina Solheim.
El gimnasio de la Universidad de Ciencias y Tecnología de Pekín recibió a miles de asistentes, siendo cientos de ellos mexicanos, quienes buscaban ser parte de la historia olímpica junto a María del Rosario.
Corrían apenas los primeros 47 segundos de combate, cuando “Chayito” Espinoza conectó de pierna izquierda su primer punto, esto después de una emboscada de la europea, quien buscó conectar, pero en su descuido, la mexicana terminó sumando su primera unidad.
Los cánticos desde el graderío eran impresionantes, entonando el famoso “México, México, México”, mientras los segundos corrían dentro del tatami y tras 2 minutos de combate, el primer periodo culminó 1-0, a favor de María del Rosario.
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Tras culminar el segundo asalto que no sufrió modificaciones, la presión de ambas atletas incrementaba, por un lado, Solheim que buscaba alcanzar a la mexicana, y por otro, María que quería incrementar la ventaja y separar un poco de su contrincante.
La taekwondoína guasavense a lo largo de su carrera como profesional conquistó tres preseas olímpicas, en Beijing, Londres y Río de Janeiro
Ya en el tercer periodo, con 30 segundos transcurridos, ambas taekwondoínas fueron al ataque, conectando la europea para su primer punto, pero en la misma acción Espinoza fabricó una unidad más para el 2-1 parcial. Faltando un minuto, con 15 segundos en el reloj, la guasavense conectó de pierna izquierda el peto azul de la noruega para colocarse a dos puntos de diferencia.
María del Rosario ya en los últimos segundos presentaba una especia de dolencia en uno de sus pies, pero eso no impidió que la sinaloense anotara un punto más en los segundos finales, pero por penalización terminó perdiendo ese punto para el 3-1 final.
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Al caer el doble digito en el electrónico, María del Rosario Espinoza corrió con su entrenador José Luis Onofre para celebrar el título, y con eso entrar al selecto grupo de mexicanos que han alcanzado la gloria en Juegos Olímpicos.
Cinco mil 478 días después, María del Rosario Espinoza ostenta en su andar como profesional una medalla de oro, una de plata y un bronce en olimpiadas, además de convertirse en madre de familia de una pequeña niña.
Así es como 15 años después, Sinaloa y México recuerdan a la gran campeona olímpica, la guasavense María del Rosario Espinoza.
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