Valladolid, España.- Barcelona cerrará hoy, ante el Valladolid,
un final de 2012 marcado por un liderazgo sin discusión en la Liga
española, unas estadísticas inéditas y el dolor por la reaparición de la
enfermedad de su estratega, Tito Vilanova.
El equipo blaugrana, que este año coronó el mejor inicio en la historia
de la Liga, afrontará el duelo con la moral caída, tras la reaparición
de un tumor en la glándula parótida de su entrenador.
?Una victoria dará más energía al entrenador. Son tres puntos
importantes, pero sería muy bueno a nivel vestuario, por todo lo que
hemos pasado, y sobre todo por Tito, que estará pendiente?, afirmó el
volante Sergio Busquets.
Lo que parecía encaminarse a una fiesta soñada, con las renovaciones de
Carles Puyol, Xavi Hernández y Lionel Messi, además del regreso de Eric
Abidal a los entrenamientos, como alicientes, se transformó en una
suerte de ?partido homenaje? para el timonel.
Vilanova fue operado el jueves. Ya abandonó la unidad de cuidados
intensivos del hospital Vall d’Hebron y estará de baja al menos seis
semanas.
?En cosas como éstas, estamos todos del mismo lado. Para Tito, su
familia y quienes estén con dificultades de este tipo, estamos con
ellos?, aseguró el director técnico del Real Madrid, José Mourinho,
quien hace poco más de un año protagonizó un incidente, al meterle un
dedo en el ojo a Vilanova y burlarse después de su apodo, al llamarlo
?Pito?.
El lugar de Vilanova será ocupado por su asistente, Jordi Roura, quien había llegado al club en la etapa final de la era Guardiola como analizador táctico de los rivales.
El duelo ante el Valladolid servirá también para constatar en qué cifra
dejará Lionel Messi su récord goleador anual. El argentino cosecha hasta
el momento 90 goles en 2012, suficientes para haber derribado la marca
de 85 del alemán Gerd Müller, que perduró 40 años.
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